La cadena de supermercados Alcampo ha anunciado el cierre de hasta 25 supermercados en España y el despido de 710 empleados, lo que equivale al 3% de su plantilla total de aproximadamente 23.300 trabajadores. La medida, parte de un plan de ajuste comunicado este jueves, busca adaptar la empresa a los cambios en los hábitos de consumo, según informó la compañía.
El plan incluye la reducción de la superficie de 15 hipermercados para alinearlos con la preferencia de los consumidores por tiendas más pequeñas y convenientes. Además, Alcampo planea renovar y modernizar más de 60 tiendas, al tiempo que refuerza su comercio online con una nueva plataforma logística. La decisión se produce tras una caída del 1% en las ventas anuales, que alcanzaron 5.004 millones de euros, reflejando los desafíos del modelo tradicional de hipermercado frente a competidores como Mercadona.
Los cierres afectan a diversas regiones, incluyendo Galicia, Aragón y Navarra, aunque la empresa aún no ha especificado las ubicaciones exactas de los 25 supermercados afectados. La medida impactará a 152 centros en total, con ajustes de plantilla que incluyen despidos y reestructuraciones. Los sindicatos, como Comisiones Obreras (CCOO), han señalado que se constituirá una mesa negociadora para analizar la documentación y comenzar las negociaciones, un proceso que podría durar varias semanas.
La compañía, propiedad de Auchan Retail, insiste en que esta reestructuración es «responsable y necesaria» para garantizar su sostenibilidad, destacando su compromiso con proveedores locales y la creación de valor en la sociedad española. Sin embargo, la noticia ha generado preocupación entre los empleados y las comunidades locales, especialmente en áreas donde Alcampo es un empleador significativo, planteando preguntas sobre el impacto económico y social de los cierres.
