Un lector me escribió: “Juegan bien aunque no marquen goles”. El Madrid, con 20 minutos de exhibición en la segunda mitad, ganó 2-0 al Atalanta y se lleva a las vitrinas una nueva Supercopa de Europa; es el equipo que más trofeos de este tipo ha ganado, seis; Ancelotti, el entrenador que más títulos ha conseguido en la historia del Real Madrid; Courtois lleva años sin recibir un gol; y ayer Bellingham se convirtió en un jugador prodigio, con una segunda parte realmente excepcional. Fue el director de la orquesta madridista.
Para redondear el concierto, Mbappé marcó su primer gol con el Madrid y Vinicius demostró que va a ganar el Balón de Oro, con dos pases maravillosos de gol, uno de ellos aprovechado por Valverde y el otro recogido por Bellingham y servido en las botas de Mbappé, con la puntualidad de un motorista de Glovo. Vinicius volvió loco a su marcador, o a sus marcadores, porque a veces eran tres y los desbordaba.
El Madrid no tuvo la sensación de ser inquietado, excepto una vez, con una parada milagrosa de Courtois, a cabezazo de Pasalic. Fue uno de esos paradones que salvan un partido, bien planteado de inicio por Gasperini, preparador del Atalanta, con mucha presión en la primera parte, lo que provocó que en la segunda parecieran agotados sus jugadores. En el fútbol está todo escrito.
Porque la primera parte terminó sin goles, aunque Rodrigo, en el último minuto del descuento –que fueron dos— estrelló un balón en el larguero. Hay que decir que Militao también había enviado al larguero, esta vez al suyo, un centro del Atalanta que no llevaba demasiado peligro.
El Real Madrid gana el primer trofeo de los siete que disputará durante la temporada. Este año, el equipo de Ancelotti es muy probable que haga más historia de lo habitual porque ha logrado un equipazo. Incluso podría jugar con dos unidades, la A y la B, porque el fondo de armario es buenísimo. Y falta Camavinga, que tiene para un mes por un golpe en un ligamento interno. Hay quien lo supla, no hay duda.
Con lo peligrosos que son estos comienzos de temporada, y las posibles dificultades de tanta estrella junta, el Real Madrid dio una lección de fútbol en la segunda parte, jugando a placer, sin escatimar esfuerzos pero tampoco asumiendo riesgos innecesarios.
Si hubiera querido, en la segunda parte el Real Madrid hubiese podido marcar más goles, pero apretó lo justo para ganar. En el inicio, algunas veces se vio sorprendido por la tenacidad del Atalanta, pero la defensa madridista estuvo francamente bien.
Primer partido de la temporada y primer título ganado. Es un golpe en la mesa del Real Madrid, que es favorito en todos los torneos. Difícilmente se encontrará un equipo mejor en la historia del club que viste de blanco. Y a lo mejor llega otro central, porque Álava no está recuperado del todo. Seis Supercopas de Europa en la buchaca, más que ningún otro equipo. Como siempre.
Bellingham, naturalmente, fue el MVP del partido. Su exhibición está grabada en Movistar, les pido que recuperen ese video y lo vean jugar. No importa disfrutarlo veinte veces. ¿Todavía hay alguna duda de que este chico puede jugar de maravilla en el centro del campo? Juega donde quiere y como quiere, es un superclase. Es el Real Madrid.
