
Casi nadie –sino Gustavo Matos, que se auto postuló al cargo– quiere ser secretario general del PSOE de Tenerife, un puesto que antes deseaban ardientemente los militantes destacados del partido.
La candidatura del actual, ya fenecida, Pedro Martín, fue rechazada por Ferraz, sin que se sepan los motivos concretos, aunque como es una cosa del Sur, a lo mejor es que o no se lleva bien con el embajador en la ONU, Héctor Gómez, amigo de Pedro Sánchez, o tiene diferencias con José Miguel Fraga, alcalde de Adeje. No lo tengo claro.

Repito que lo que digo es una hipótesis, no dispongo de elementos nuevos de juicio. Por lo menos, el apoyo de Héctor no lo tiene Pedro Martín, un secretario general mediocre y un mal presidente –que fue— del Cabildo de Tenerife. Hay que decir que los secretarios generales insulares suelen ser luego candidatos a los cabildos.
Se habló, para sustituirlo, del alcalde de La Laguna, Luis Yeray Gutiérrez, que dio un no rotundo a su promoción para ocupar el cargo y se puso a correr por la calle de La Carrera a través, como su propio nombre indica.

Pero, antes, se le había ofrecido la secretaría general insular al que fuera alcalde del Puerto de la Cruz, Marco González. Marco, Luis Yeray y Patricia Hernández, la gomera líder del PSOE de Santa Cruz y ex alcaldesa, son muy buenos aliados. Y apoyaban a Marco, pero éste perdió poder al dejar la alcaldía en manos del PP portuense, tras una moción de censura que prosperó. Y se vio con menos opciones.
Entonces, Ángel Víctor Torres, que por cierto quiere mantener la hegemonía del PSOE canario desde Las Palmas (¿qué pintaba Carolina Darias, la alcaldesa de Las Palmas, presidiendo la Mesa del Congreso socialista tinerfeño?) propuso a Aarón Afonso, funcionario de carrera de la Comunidad Autónoma, hoy en el Cabildo, como aspirante al puesto de secretario general.

Pero debió hablar Aarón con su familia porque primero dijo que se lo pensaría y después se negó en rotundo aceptar la candidatura. Y se echó a correr, Taoro arriba, para que no lo forzaran a aceptarlo. Incluso nosotros publicamos en este periódico que era un serio candidato al cargo. Y lo era. Hasta que se echó a correr.
Descartados Pedro Martín, Luis Yeray, Marco y Aarón, aparece en escena Gustavo Matos, ex presidente del Parlamento de Canarias y abogado en ejercicio, además de diputado regional, para ofrecerse a ocuparlo. Parece que tampoco les hace mucha gracia a sus compañeros este ofrecimiento y le han pasado la pelota a Valbuena, ex consejero de Medio Ambiente con Ángel Víctor de presidente del Gobierno.

Pero, claro, Valbuena está enfrentado al líder del PSOE en el Sur de la isla y eterno alcalde de Adeje, por su rechazo, desde el cargo que ocupaba, al proyecto hotelero de Cuna del Alma. Por cierto, una maravilla de construcción costera, entre otros propiedad de Fachi Zamorano y de su hermana Mariel, los del Bahía del Duque y otras promociones fallidas en Italia.
Con José Miguel Fraga en contra, es difícil que el cargo sea para Valbuena, así que o recapacitan y convencen a Marco González para que acepte este carguito en el PSOE institucional –Marco ha sido alcalde y tiene experiencia— o se auto catapulta Matos y deja su despacho otra vez para ocuparse de su partido, además de recibir el sueldito de parlamentario regional, que no es malo del todo. Matos es también gran aficionado al Real Madrid y esto puntúa.

Y así están las cosas en el PSOE tinerfeño, por cierto cabreados muchos militantes y dirigentes porque la Mesa del congreso insular de Tenerife tradicionalmente lo ha presidido un tinerfeño, y no un canarión (Carolina lo es).
De ahí que el 29% de los asistentes se haya abstenido en el voto a la nueva Ejecutiva insular (el voto en contra está prohibido en este partido democrático), frente al 71% que avaló las propuestas de Ángel Víctor Torres. No ocurrió lo mismo con la gestión, que fue aprobada casi por unanimidad.
¿Qué pintaba Carolina Darias presidiendo en Congreso del PSOE tinerfeño, repito? Pues nada. Será que ahora, como va a reventar el Teide, pues al PSOE de Las Palmas le interesa que también reviente el PSOE de Tenerife. Es una opinión personal.
Así están las cosas y, claro, viéndolas más o menos de cerca, no hay un candidato claro que vaya a convertirse en el líder del PSOE tinerfeño y mano derecha del ministro Torres –secretario general regional— en la isla. Si les digo la verdad, no tengo ni idea de quién puede ser el elegido. Se admiten apuestas. Pero yo los veo a todos corriendo despavoridos, menos a Matos, que corre también pero hacia adentro.