España tiene en sus manos a Marruecos, pero Sánchez le tiene terror al país alauita. ¿Por qué? Él sabrá, pero Marruecos parece que tiene información sensible no sólo de Sánchez, sino también de su familia. Esta es la opinión más extendida, que está presente en todas las informaciones que se refieren a ambos países.
Marruecos acosa a España constantemente: realiza maniobras navales en aguas cercanas a Canarias, que todavía no tienen dueño, a pesar de que fueron reconocidas unilateralmente por Zapatero, según promesa hecha al Gobierno de Canarias cuando era presidente. Sólo para captar los votos de CC en el Congreso porque el ex presidente no hizo gestión alguna, que se sepa, con los organismos internacionales que deben avalar un futuro tratado marítimo entre ambos países.
El monarca alauita y su Gobierno pretenden llevarse la final del Campeonato Mundial de Fútbol, para lo que construyen un estadio con más capacidad que el nuevo Bernabéu; también le quieren disputar a España el campeonato de Fórmula 1. Esto, en el terreno deportivo.
Y en el terreno político, no hacen más que reivindicar constantemente Ceuta y Melilla y los islotes adyacentes a sus costas que pertenecen a España e, incluso, se han atrevido a colocar en sus mapas docentes las Islas Canarias como territorio potencialmente marroquí.
Las Fuerzas Armadas marroquíes se han reforzado notablemente en los últimos años, lo que ha obligado al Ministerio de Defensa a reforzar las dotaciones destacadas en Canarias, tanto de hombres como de medios. Se ha hecho todo muy discretamente.
Cientos de menores están entrando, a nado, diariamente hasta Ceuta y por otros medios a Melilla, cuyos refugios para inmigrantes están desbordados. Muchos de ellos mueren en el mar, pero a Marruecos parece no importarle. Y Marruecos ha creado un problema en las fronteras entre los dos países, que todavía no está solucionado. Sólo dos pasos fronterizos de Ceuta y Melilla están abiertos desde 2022, de los cuatro que existían.
Y lo curioso es que España tiene en sus manos a Marruecos. Nos referimos a los meses desde junio a septiembre. Si se corta el flujo de personas en tránsito terrestre desde Francia a los puertos del sur de España, de donde parten ferries hacia Marruecos –sobre todo desde Algeciras–, Europa se colapsaría y los marroquíes residentes en el continente no podrían regresar a su país a pasar sus vacaciones, como es tradicional. España tiene esa llave, pero permite que Marruecos le amenace constantemente, sin contestación por parte del Ejecutivo español. Tampoco rechista la Unión Europea, que sigue comprando productos agrícolas a Marruecos.
¿Es que nadie se cansa de las amenazas del Reino marroquí, que es el verdadero culpable de la emigración ilegal hacia España? Lo es, ya que de los países vecinos (los visitados por Pedro Sánchez en estos días, Senegal, Gambia y Mauritania) les es mucho más difícil y arriesgado para los ilegales llegar a Canarias. Por eso entran en Marruecos, donde más operan las mafias, y desde puertos marroquíes salen con dirección a las islas. O en cayucos o en barcos-nodriza que los dejan a unas millas de Canarias.
Pero, sin embargo, Sánchez no ha viajado al país culpable de gran parte de las 29.000 llegadas de ilegales a España en lo que va de año (25.000 a las Islas Canarias, hasta agosto). Y Marruecos continúa con sus amenazas y con un calculado flujo de emigrantes de esta nacionalidad, no sólo a España sino a Europa. ¿Pero es que Europa no lo ve?
La Spagna ha bisogno di una Meloni,sveglia spagnoli o diventerere tutti marocchini !!!