El volcán Kilauea, situado en la Isla Grande de Hawái, ha vuelto a entrar en erupción este domingo, ofreciendo un espectáculo natural impresionante. Las fuentes de lava han alcanzado alturas de hasta 300 metros, iluminando el cielo nocturno y atrayendo a numerosos visitantes al Parque Nacional de los Volcanes de Hawái.
El episodio eruptivo comenzó en las primeras horas del domingo en el cráter Halemaʻumaʻu, dentro de la caldera del Kilauea. El respiradero norte ha sido el más activo, con fuentes de lava que han superado los 300 metros de altura, mientras que el respiradero sur ha registrado alturas de aproximadamente 70 metros.
Según el Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS), esta es una de las erupciones más intensas registradas en las últimas décadas en el Kilauea, uno de los volcanes más activos del mundo .
A pesar de la espectacularidad del fenómeno, las autoridades han informado que la lava permanece confinada dentro del cráter, sin representar una amenaza inmediata para las áreas residenciales. Sin embargo, se ha emitido una alerta de precaución nivel naranja, instando a los visitantes y residentes a mantenerse informados y seguir las indicaciones de las autoridades locales.
El Parque Nacional de los Volcanes de Hawái ha experimentado un aumento en el número de visitantes, muchos de los cuales se acercan para presenciar el fenómeno natural. Las autoridades del parque han reforzado las medidas de seguridad y han establecido zonas de observación seguras para garantizar la protección de los turistas.
El Kilauea ha estado en erupción intermitente desde diciembre de 2024, con episodios que varían en intensidad y duración. La actividad actual marca uno de los eventos más significativos en este período, destacando la naturaleza dinámica y cambiante de los sistemas volcánicos en Hawái.
Los científicos continúan monitoreando de cerca la actividad del volcán para detectar posibles cambios que puedan representar riesgos adicionales.
