Un nuevo antibiótico oral, la gepotidacina, ha demostrado ser eficaz para tratar la gonorrea, incluso en casos resistentes a los tratamientos estándar, según un estudio publicado este lunes en la revista The Lancet. Desarrollado por la farmacéutica GSK, este fármaco podría convertirse en el primer tratamiento novedoso para esta infección de transmisión sexual (ITS) en más de dos décadas, ofreciendo una esperanza frente al alarmante aumento de cepas resistentes a antibióticos.
El ensayo clínico de fase 3, que incluyó a más de 600 pacientes de 16 a 77 años en 14 países, mostró que la gepotidacina, tomada dos veces al día, logró curar el 92,6% de los casos de gonorrea urogenital no complicada, un resultado comparable al 91,2% de eficacia del tratamiento estándar, que combina una inyección de ceftriaxona y azitromicina oral. La gepotidacina, perteneciente a una nueva clase de antibióticos llamada triazaacenaftilenos, actúa bloqueando dos enzimas esenciales para la replicación de la bacteria Neisseria gonorrhoeae, lo que la hace efectiva contra cepas resistentes a múltiples fármacos.
La gonorrea, con unos 82 millones de casos nuevos al año según GSK, ha visto un aumento del 118% en los casos reportados en EE. UU. entre 2009 y 2021, y en Europa se registraron 70.881 casos confirmados en 2022, un 48% más que el año anterior. La resistencia a antibióticos como la ceftriaxona, considerada la última línea de defensa, ha crecido, con 15 casos resistentes detectados en Inglaterra entre 2022 y 2024, cinco de ellos “extremadamente resistentes”. En España, aunque la resistencia a ceftriaxona se mantiene baja (0,2%), la necesidad de alternativas es urgente.
“La resistencia de la gonorrea a los antibióticos es una amenaza creciente para la salud pública”, afirmó Manica Balasegaram, directora ejecutiva de la ONG GARDP, en un comunicado. Los efectos secundarios de la gepotidacina, principalmente molestias gastrointestinales leves o moderadas, fueron bien tolerados, aunque los investigadores destacaron la importancia de estudiar su eficacia en mujeres y comunidades diversas, ya que el 92% de los participantes del ensayo fueron hombres.
El fármaco, aprobado en marzo por la FDA para infecciones urinarias bajo el nombre Blujepa, espera ahora la autorización para tratar la gonorrea, lo que podría ocurrir en el segundo semestre de 2025. Sin embargo, expertos como David Harvey, de la National Coalition of STD Directors, advirtieron que los recortes en laboratorios de vigilancia de ITS, como uno cerrado recientemente por los CDC, podrían complicar el monitoreo de la resistencia bacteriana, dificultando la implementación de nuevos tratamientos.
El descubrimiento llega en un momento crítico, con la gonorrea causando complicaciones como infertilidad y enfermedad inflamatoria pélvica si no se trata. Mientras la comunidad científica celebra este avance, la atención se centra en garantizar que la gepotidacina sea accesible, especialmente en países de bajos ingresos donde la ITS es más prevalente, para evitar que la resistencia bacteriana convierta esta enfermedad en una amenaza intratable.