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domingo, 25 mayo,2025

Sánchez se perdió una cumbre internacional

Mientras los principales mandatarios del mundo aprovecharon el funeral del papa Francisco para mantener contactos diplomáticos de gran calado, Pedro Sánchez decidió no acudir a la cita en el Vaticano. La ausencia del presidente del Gobierno, sin justificación pública pese a su agenda despejada, contrasta con la intensa actividad política que se desplegó en Roma.

Junto y dentro de la basílica de San Pedro, entre discretos intercambios, se sentaron figuras como Donald Trump, Volodimir Zelenski o Ursula von der Leyen, en un ambiente donde las conversaciones informales parecían tan relevantes como el propio acto religioso. Los Reyes Don Felipe y Doña Letizia, acompañados por varios miembros del Gobierno y del principal partido de la oposición, encabezaron una representación española en la que llamó la atención la falta de coordinación institucional: a diferencia de otros países europeos, España no presentó una delegación conjunta entre el jefe de Estado y el jefe de Gobierno.

El despliegue protocolario de los Reyes no pasó desapercibido. Vestidos de luto riguroso, protagonizaron un inusual “besamanos” improvisado en el exterior del templo, donde líderes como Emmanuel Macron, Frank-Walter Steinmeier o el heredero de Abu Dabi se acercaron a saludar. La reina Letizia, renunciando al uso de la mantilla tradicional, lució una discreta pieza de encaje negro y una joya histórica, mientras que don Felipe mantenía breves intercambios de cortesía, incluido un saludo con Donald Trump.

Desde el Gobierno, el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, restó importancia al gesto entre el rey y el expresidente estadounidense, equiparándolo a otros saludos protocolarios. Sin embargo, las imágenes y los contactos evidenciaron que más allá del acto religioso, Roma fue escenario de negociaciones y acercamientos cruciales en un momento de alta tensión geopolítica, con Ucrania y Oriente Medio en el centro de las conversaciones.

Mientras tanto, Sánchez optó por mantenerse al margen de este espacio de relaciones internacionales, una decisión que deja preguntas abiertas sobre la estrategia diplomática de España en un escenario global cada vez más interconectado. Paradójicamente, don Felipe, tras despedirse en Roma, voló a Sevilla para presidir la final de la Copa del Rey, completando así una jornada que mezcla la solemnidad internacional con el compromiso institucional en casa.

Gabriel Suárez
Gabriel Suárez
Redactor de El Burgado, estudiante de Periodismo en la Universidad de La Laguna, directivo de la Coordinadora de Representantes de Estudiantes de Universidades Públicas, Vicepresidente del Consejo de Estudiantes de la Universidad de La Laguna y colaborador en programas de televisión y emisoras de radios

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