No crean a Sánchez

Que los afectados por las inundaciones en la Comunidad Valenciana no crean a Sánchez. Sánchez miente siempre, nadie miente mejor que él, ni nadie en España ha mentido tanto desempeñando un cargo público. El volcán de Cumbre Vieja se apagó hace dos años y todavía los palmeros no han recibido lo que les prometió. Hay algunos afectados que viven aún en hoteles porque no tienen casa y otros en alojamientos provisionales que dejan mucho que desear. Venía aquí en el Falcon, decía cuatro trolas y se iba. Casi todo lo que recibieron los palmeros vino de Canarias, del esfuerzo de los canarios, a través de sus instituciones. Que los valencianos no le crean a este insensato que preside el Gobierno, porque va a ir a la zona afectada por la DANA, va a hacer un montón de promesas, declarará zona catastrófica los territorios que han sufrido las inundaciones y luego no le pagará a nadie. Este tipo es un auténtico caradura que ha abandonado a Canarias en el tema de la inmigración ilegal y que sólo da (o al menos promete) cuando recibe a cambio votos, los votos necesarios para mantenerse en el poder. Cuidado con este personaje, que ha venezolanizado España, que promete y no cumple, que es capaz de mentirse incluso a sí mismo. Fíjense cómo actúa esa izquierda benemérita (la derecha tampoco es angelical) que hay vecinos de Lorca que todavía no han cobrado lo que les prometieron en 2011. Creo que gobernaba Zapatero, el que le prometió a Ana Oramas 10.000 millones de euros para las islas si le apoyaba en el Congreso de los Diputados. Firmaron hasta un papel, en el que Zapatero reconocía (por la cara) que Canarias tendría sus propias aguas jurisdiccionales. Como si él mismo fuera capaz de inventarse un Tratado de Montego-Bay, de manera unilateral. Otro mentiroso, aunque menos que Sánchez, hay que decirlo. Canarias no vio nunca aportaciones significativas del Gobierno de Zapatero, que duró casi dos legislaturas. No crean a Sánchez los habitantes de la Comunidad Valenciana. Es un mentiroso compulsivo que falsificó hasta su tesis doctoral y se felicitó de que su mujer fuera asimilada poco menos que a catedrática por la Complutense, que no pudo caer más bajo. Begoña es otra figura del truco. Mierda de país.