Este domingo 18 de mayo de 2025, el papa León XIV ha iniciado oficialmente su pontificado con una misa solemne en la Plaza de San Pedro del Vaticano, ante más de 200,000 fieles y representantes de 150 delegaciones internacionales. Entre los asistentes destacaron líderes como el presidente italiano Sergio Mattarella, la primera ministra Giorgia Meloni, el vicepresidente de EE.UU. J.D. Vance, los Reyes de España, y el presidente de Ucrania Volodímir Zelenski.
Durante la ceremonia, el papa recibió el palio y el Anillo del Pescador, símbolos de su autoridad como sucesor de Pedro. En su homilía, hizo un llamado a la unidad de la Iglesia frente al odio moderno, los conflictos, los prejuicios y la marginalización causada por el modelo económico actual.
León XIV expresó su deseo de ser un servidor de la fe, recordando con emoción al papa Francisco y destacando el deseo del cónclave de elegir a un pastor que proteja la fe y mire hacia el futuro.
El nuevo pontífice también abogó por una fraternidad que supere el odio, la violencia y la exclusión, reconociendo divisiones internas en la Iglesia tras las reformas de su predecesor y proponiendo un liderazgo pastoral humilde y dialogante.
En el ámbito internacional, León XIV expresó su esperanza de que Ucrania logre una «paz justa y duradera», y recordó a los «supervivientes» de Gaza y Birmania, mostrando su intención de mantener una diplomacia activa.
La reina Letizia hizo uso del exclusivo «privilegio del blanco» durante la misa, vistiendo un vestido blanco por debajo de la rodilla y mantilla a juego, un privilegio reservado únicamente a algunas reinas católicas.
Con 69 años, se espera que el pontificado de León XIV sea extenso y conciliador, marcando un hito histórico y simbólico en la continuidad de la Iglesia católica.