La Policía Nacional ha iniciado una investigación exhaustiva tras el presunto secuestro de una mujer y su hijo de 19 años en una villa de lujo ubicada en la urbanización El Salobre, en el municipio de San Bartolomé de Tirajana, al sur de Gran Canaria. El caso comenzó cuando un familiar alertó a las autoridades en la madrugada del jueves, tras no poder contactar con ellos y temer por su seguridad.
Según fuentes cercanas a la investigación, el suceso tuvo lugar el miércoles por la tarde, cuando dos individuos armados habrían ingresado a la vivienda, propiedad de un conocido empresario local vinculado al narcotráfico, identificado como José, alias «el del Buque». Los atacantes, que llegaron a bordo de un Audi negro, habrían obligado a la mujer y al joven a subir al vehículo antes de huir rumbo a Pasito Blanco, donde se perdió su rastro. La principal hipótesis apunta a un ajuste de cuentas relacionado con un supuesto robo de droga, una práctica conocida como «vuelco» en el argot delictivo, que habría sido ordenada por la organización de José contra una banda rival.
El operativo policial se activó de inmediato, con un amplio despliegue de agentes que acordonaron la villa y reforzaron la vigilancia en carreteras, puertos y aeropuertos de la isla para evitar la fuga de los secuestradores. Además, un equipo especializado en delitos violentos, desplazado desde la península, se sumó a la investigación, que se lleva a cabo con hermetismo. Aunque el vehículo utilizado en el secuestro fue localizado en Pasito Blanco, hasta el cierre de esta edición no se habían reportado avances sobre el paradero de las víctimas ni contactos por parte de los captores exigiendo un rescate.
La Jefatura Superior de Policía de Canarias confirmó que la investigación está en curso, pero declinó ofrecer más detalles hasta que las circunstancias lo permitan. El caso ha conmocionado a la tranquila urbanización de El Salobre, un enclave de lujo en Gran Canaria, y pone de relieve las tensiones derivadas del crimen organizado en la región. Las autoridades trabajan contrarreloj para localizar a la madre y su hijo, mientras crece la incertidumbre sobre los motivos y el desenlace de este grave incidente.