La Policía de Río de Janeiro ha frustrado un intento de atentado con bomba durante el masivo concierto gratuito de Lady Gaga celebrado el sábado en la playa de Copacabana, al que asistieron cerca de dos millones de personas. Las autoridades confirmaron la detención de dos sospechosos, el supuesto líder del plan y un adolescente, desarticulando así la trama antes de que se ejecutara.
Según un comunicado emitido por la Policía a través de su cuenta en la red social X, los detenidos formaban parte de un grupo que planeaba usar explosivos improvisados y cócteles molotov para atacar el evento, con el objetivo de ganar notoriedad en redes sociales. El líder, arrestado en el estado de Rio Grande do Sul por posesión ilegal de arma de fuego, también difundía discursos de odio dirigidos principalmente contra niños, adolescentes y la comunidad LGBTQIA+. El adolescente, detenido en Río de Janeiro, enfrenta cargos adicionales por almacenamiento de pornografía infantil.
El concierto, que marcó el regreso de Lady Gaga a Brasil tras 13 años, contó con un despliegue de seguridad sin precedentes, incluyendo más de 5.000 agentes, drones y cámaras con reconocimiento facial, además de 18 puntos de búsqueda con detectores de metales. Durante el evento, la Policía Militar incautó más de 200 cuchillos, aunque estos no se relacionan con la operación contra el atentado, bautizada como «Fake Monster». La investigación reveló que los sospechosos reclutaban participantes, incluidos menores, a través de plataformas digitales, utilizando perfiles falsos para camuflarse como fans de la cantante.
Aunque el concierto transcurrió sin incidentes y fue celebrado como un éxito económico para Río, con una estimación de 100 millones de dólares en beneficios, la amenaza ha generado preocupación sobre la seguridad en eventos masivos. Las autoridades continúan analizando dispositivos electrónicos confiscados en allanamientos realizados en cuatro estados brasileños para determinar la magnitud de la red involucrada.