
Ayer entregó sus premios la Universidad de La Laguna. Entre ellos, el premio Alonso de Nava y Grimón, que recogió Juan-Manuel García Ramos, como reconocimiento a su actividad docente y divulgativa de los valores universitarios durante los 50 años que ha estado ligado a la ULL. El premio lo concede Alumni, la asociación de antiguos alumnos universitarios, que tiene gran predicamento en la casi totalidad de las universidades españolas. Juan-Manuel es catedrático emérito de Lengua Española y su candidatura fue apoyada de forma rotunda por el Departamento y por el Decanato, además de por los alumnos. Estuvo con Juan-Manuel en la entrega de premios su amigo el también catedrático y primer adjunto de la defensora del pueblo, Antonio Alarcó. García Ramos recogió su merecida recompensa de la mano del rector de la Universidad, en un acto en el que también fueron entregados otros premios, en el Paraninfo de la Universidad, en el viejo edificio de la ULL que hoy ocupa el Rectorado.

Este periódico adelantó hace días la concesión del XV Premio Alonso de Nava y Grimón al profesor García Ramos. Y cambio de tema. Dentro de unos días, todavía no tengo datos sobre el acto, se le rendirá homenaje en Tenerife a Celia Cruz, cuyo representante y heredero, Omer Pardillo, estará en Tenerife con motivo del reconocimiento de la isla a esta artista, que tantas veces triunfó en sus escenarios. Con él viajará a Tenerife, con casi toda seguridad, nuestro corresponsal en Nueva York, Félix Lam, que fue el fotógrafo oficial de La Huarachera de Cuba durante tantos años. Celia está unida a la historia de Tenerife y yo tuve el honor de que una vez me cantara el Cumpleaños feliz, un16 de agosto, día de mi cumpleaños, en el restaurante La Cascada del Parque Marítimo de Santa Cruz. Era una buena amiga y una enamorada de estas islas. El coso del Puerto de la Cruz, que fue suspendido por la lluvia el sábado pasado, se celebrará el próximo sábado, con el mismo recorrido, con lo que se pondrá fin a los actos del Carnaval portuense. Este año, la lluvia deslució mucho la mayoría de estos actos, pero ya saben, la naturaleza hace su trabajo y no hay quien la pare. Y por hoy, poco más que contarles. La gente está con la resaca de las fiestas y no se prodiga mucho en actos dignos de reseñar. Habrá que esperar a mañana. O a pasado.