El conocido naturalista y youtuber Frank Cuesta ha sorprendido a sus seguidores con una confesión pública en un vídeo subido a su canal de YouTube este martes, donde reconoce que no tiene cáncer y que todos los animales de su supuesto santuario en Tailandia fueron comprados, no rescatados. En un tono emocional, Cuesta admitió que su vida pública se descontroló debido a un «grave problema de mitomanía y ego», afirmando que «se me ha ido de las manos».
Cuesta, popularmente conocido como ‘Frank de la Jungla’, detalló que el santuario que gestionaba es en realidad «más una granja de animales» ya que adquirió a todas las criaturas, desmintiendo años de narrativa sobre rescates. «Nunca he rescatado animales y ha sido todo parte de un show que poco a poco se me ha ido yendo de las manos», explicó, asumiendo responsabilidad por engañar a su audiencia. También se disculpó con su excolaborador Chi, a quien acusó anteriormente de traición, aceptando la culpa por el odio que este recibió tras su detención en febrero por posesión ilegal de animales salvajes.
El vídeo, interpretado por algunos como parte de un posible acuerdo con Chi para retirar una denuncia, también aborda su detención en Tailandia, aclarando que fue consecuencia de una denuncia anónima por animales sin papeles legales, y no de las personas señaladas previamente. Cuesta admitió negligencias que causaron muertes de animales en su cuidado y pidió disculpas públicas por aprovecharse de sus seguidores, fijando un comentario para enfatizar que no se trataba de sarcasmo, sino de «la realidad».
La confesión ha generado un torbellino de reacciones, desde incredulidad hasta críticas por años de supuesta manipulación, especialmente tras recientes acusaciones de maltrato animal y estafa basadas en audios filtrados. Cuesta, que había estado ausente de las redes tras borrar gran parte de su contenido, parece buscar redimirse, aunque su credibilidad queda severamente cuestionada.