Sin querer, o queriendo quizá, Sánchez se ha puesto en el lado de los malos. Ha resucitado, con su proyecto de decretazo, o quizá de ley que no aprobarán las Cortes, la prensa del Movimiento. Por defender a su amada Bego ha parido una serie de medidas restrictivas contra la prensa, anunciando, además, que repartirá el dinero de nuestros impuestos, a modo de publicidad, a los medios que hablen bien de él. Lo ha dicho de una manera sutil, pero lo ha dicho. Ha resucitado el ¡Arriba!, El Alcázar y todos aquellos periódicos que, como Público hoy y unos cuantos más, escriben a su dictado y a favor de su amada catedrática de la Complutense. Sánchez ya no sabe qué hacer. A saber: uno, no le hace falta el Parlamento para gobernar: como no lo apoya, lo desprecia; dos, el Consejo de Ministros aprueba una serie de medidas destinadas a controlar a la prensa; tres, repartirá nuestro dinero de los impuestos entre los que hablen bien de él y de la Begoña/catedrática; cuatro, esto no lo dice, pero lo intuyo, mandará a la temible Agencia Tributaria a inspeccionar a quien se salga de madre. Un servidor está salvado, es más pobre que las ratas. Así que la Agencia Tributaria se puede ir, con todos mis respetos, a tomar por el saco. El camarada Sánchez, con estas actitudes, pretende resucitar la prensa del Movimiento, aquella que usaba Franco para sostener su régimen. O sea, que no hay mucha diferencia entre la actitud del régimen de Franco, en el tema de prensa, y el régimen de Sánchez. Y a ver si este autócrata es capaz de discutirme eso, o de mandarme al Sebin, como hace Maduro cuando alguien le molesta o se pone una camiseta de María Corina. Sería lo último que me quedaría por ver. No se dice nada en el texto aprobado de la censura previa, pero con este autócrata en el Gobierno, y si los periódicos siguen informando sobre la Bego, la censura previa llegará. Y el Ministerio de Información y Turismo. Que viva el nuevo PSOE progresista de Sánchez, que viva la autarquía, que viva el César visionario. ¡A la mierda!, diría Fernando Fernán-Gómez, paz descanse, sacando la cabeza de la tumba.
viernes, octubre 11, 2024