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Un avión Airbus A330 del Ejército del Aire y del Espacio español, que transportaba a la ministra de Defensa, Margarita Robles, hacia la base aérea de Siauliai (Lituania), sufrió un intento de interferencia en su sistema de navegación GPS al sobrevolar Kaliningrado (Rusia) esta mañana. El incidente, que buscaba perturbar el sistema de navegación del avión militar, no tuvo consecuencias gracias a un segundo GPS militar que neutralizó el ataque. Un comandante a bordo minimizó el suceso, señalando que estas interferencias son habituales en la zona, tanto para aeronaves civiles como militares.
En el vuelo viajaban también familiares de los militares del Destacamento VILKAS y periodistas que acompañaban a la ministra en su visita oficial. En Siauliai, Robles se reunió con su homóloga lituana, Dovile Sakaliene, para reforzar la cooperación de la OTAN frente a las tensiones con Rusia. Ambas ministras calificaron a Rusia como una «amenaza real» para los aliados. Sakaliene propuso evolucionar de misiones de vigilancia aérea a un enfoque de «defensa aérea», aunque no especificó detalles.
Robles defendió la vía diplomática para resolver conflictos, subrayando que «España apuesta por la paz y los acuerdos». Durante una rueda de prensa aseguró que estos incidentes no debilitarán el compromiso español con la paz.
Alemania denunció hoy que un avión militar ruso sobrevoló una fragata de su Armada en el mar Báltico. El ministro alemán de Defensa, Boris Pistorius, acusó a Rusia de intentar «provocar» a la OTAN y detectar sus debilidades, pero destacó la respuesta unificada y prudente de la Alianza.
Este tipo de incidentes no es aislado. A principios de mes, un vuelo de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, sufrió interferencias en el GPS, forzando un aterrizaje de emergencia en Bulgaria. Bruselas señaló al Kremlin como responsable.
Las crecientes violaciones del espacio aéreo aliado llevaron a la OTAN a lanzar la operación «Centinela Oriental» el pasado 12 de septiembre. Esta iniciativa busca fortalecer la presencia militar en el flanco oriental. España ha contribuido con tres Eurofighters, un sistema de radar y un avión A400. Desde la invasión rusa de Crimea en 2014 y, especialmente, tras el inicio de la guerra en Ucrania en 2022, las misiones de interceptación de aviones rusos por parte de cazas españoles en Lituania son casi diarias, debido a la cercanía de Kaliningrado.