La diplomacia vaticana, que presume de ser exacta y de tener los mejores espías del mundo –los nuncios—, que gozan de protección consular, ha pasado a la ramplonería. Y es que, además de ser diplomático, hay que ser también oportuno y esta vez el papa Francisco ha sido poco prudente al presentar su nuevo nuncio en Caracas sus credenciales ante el Gobierno ilegítimo de Maduro. Maduro ya no está legitimado, lo ha dicho hasta la ONU, que siempre es la última del mundo en reconocer las evidencias. Y lo han dicho los países democráticos de Latinoamérica. Lo ha dicho el pueblo venezolano. Por lo tanto, esta vez el Vaticano ha errado y su nuevo representante en Venezuela, el arzobispo español Alberto Ortega Martín, ha llegado al país de manera inoportuna y ha entregado a Maduro, el presidente ilegítimo, sus cartas credenciales. El papa pudo esperar porque desde 2021 no hay nuncio en Caracas. Maduro ha aprovechado para publicitar el acto de entrega, en otro intento por legitimar su régimen, tras negar a las urnas la victoria de la oposición a fuerza de trampas. Estaban presentes en el acto en Miraflores el canciller venezolano Yván Gil y la viceministra de Relaciones Exteriores para Europa, Coromoto Godoy. Las relaciones entre el Vaticano y Venezuela fueron instauradas en 1869, pero desde 2021 falta un nuncio tras la marcha de Aldo Giordano, que murió meses después, víctima del covid, siendo ya nuncio ante la Unión Europea. Sirvió ocho años en Venezuela. El papa ha dicho que “Venezuela está viviendo una situación crítica y exhorto a las partes que busquen la verdad y se comporten con moderación para evitar la violencia”. Una obviedad, por otra parte. Pero la inoportunidad de esta presentación de credenciales es evidente, ante un régimen que tiene las horas contadas y que hizo trampas en unas elecciones democráticas. Luego la diplomacia vaticana no parece tan brillante como cuenta su fama, ni este papa tiene la idea de coherencia y neutralidad muy desarrollada, por lo que se ve. ¿Qué dice el papa de los 27 muertos por las fuerzas de Maduro, uno de ellos a palos? Me da que no han informado bien a Francisco, o que Francisco está gagá, o que el Vaticano ha perdido esa tradicional virtud de neutralidad y de prudencia que lo ha caracterizado siempre. La propaganda del régimen chavista se ha apresurado a difundir la foto de la entrega de cartas credenciales, repito que como una legitimación de la victoria de Maduro, que no se ha producido. Está reconocido internacionalmente, y con pruebas, que Maduro falsificó el proceso electoral, las actas oficiales siguen sin ser publicadas por el Gobierno y no se entiende el espaldarazo del Vaticano a su régimen, en vez de esperar a que se aclare el proceso para presentar un nuncio para una sede que estaba vacante desde hace tres años. Ni que decir tiene que el gesto del Vaticano ha sentado como un tiro en la oposición al régimen chavista, que se mantiene por la fuerza en el poder, dándole la espalda a las propias urnas.
miércoles, diciembre 11, 2024
Es que de un papa comunista, montonero y del Cártel de Puebla no se puede esperar a otra cosa. Menos mal que hay religios@s de a pie que mantienen la fe en la Iglesia que Cristo fundó. Cuánto daño le está haciendo este hombre a la institución eclesiástica