
A la Bego le han caído otras dos imputaciones. Una, por apropiación indebida (del software de la Complutense) y otra por intrusismo profesional. Hay que unirlas a las otras dos investigaciones que tiene encima, una por tráfico de influencias y otra por corrupción en los negocios. El juez Peinado sigue trabajando y la Pichona, en funciones de primera dama chimba, porque no hay primeras damas en España y en cualquier caso lo sería la reina, que tampoco, continúa su gira por la India, con el Pichón, alejados ambos del foco mediático. Sánchez ha descubierto que en la India lo aclaman (porque no saben quién es) y le tiran flores, mientras en España lo abuchean y lo llaman corrupto y más cosas. Así que lo más conveniente es que se quede allí, que a lo mejor hace carrera y monta un partido con Koldo, Errejón, Aldama, la Yoli Tucán, su hermanito y toda la basca española (que no mea sola). “No hay nada”, dice Sánchez, “son cosas de la extrema derecha”. Pues vale. Mientras ellos se divierten, con viaje pagado, luciendo bufandas hindúes de colores, con un amplísimo séquito, aquí en España la cosa arde: desgracias meteorológicas por Levante y la UCO investigando a ver si Ábalos se mamó medio millón de euros de comisión por el asunto de las mascarillas, con compras a amiguitos y suculentas mordidas. Eso se investiga, o sea que habrá que esperar. Gratis no hace nadie nada y menos en este país. Ya se comenta en el Volantín Trepador que los israelitas han dejado sorda y medio ciega a Ada Colau y a otro correligionario, de cuyo nombre no me acuerdo.

Formaban parte de un convoy palestino (¿a quién se le ocurre?) y los judíos les lanzaron cohetes ensordecedores y gases pica-pica. Otras informaciones indican que los afectados estaban recogiendo aceitunas cerca de Gaza, para ayudar a los palestinos. Pue no sé. Lean El Volantín, ahí tienen más detalles. Como están las cosas, lo mejor es asegurar esos viajes, mujer. Y han llamado a declarar al novio de Ayuso por fraude fiscal (supuesto todavía), casi al mismo tiempo que a Begoña por los motivos reseñados. Me parece que el novio de Ayuso tiene la indefensión a huevos, por el asunto del fiscal García Ortiz y sus revelaciones, pero en los asuntos de la justicia es mejor andar con pies de plomo, porque la justicia es como un cónclave para la elección de sumo pontífice: quien entra papa, sale cardenal. Sigo sin saber qué hacen los Sánchez en la India, espero que no hayan coincidido allí con Delcy, que anda de viaje –con maletas– por Oriente. Financial Times ha dicho que la política de Sánchez es “inconsistente”. ¿No se habrá quedado corto el periódico económico? Bueno, en Estados Unidos están que trinan por un video, propaganda de Kamala, en el que un joven se masturba. ¿Dónde está la famosa falsa moral USA? ¿Será Kamala tan salida como nuestro Errejón? Yo no lo creo, porque según Aida Nízar, que es una esporádica de la televisión, Errejón le golpeó con fuerza las nalgas. Ay, Dios. Ya ha presentado denuncia. No había tenido tiempo, porque la cosa ocurrió en 2015, si no he leído mal. A Errejón lo van a crucificar los suyos, pero yo lo metería en un hospital antes que en el talego. Sólo le ha echado un cabo la jueza jubilada Manuela Carmena, ex alcaldesa de Madrid. Bueno, hay que tener caridad también con el que está sufriendo. No sé qué dirán las acosadas.
