A partir de enero de 2026, todos los patinetes eléctricos que cumplan ciertos requisitos deberán contar con un seguro obligatorio en España. Quienes no lo tengan podrán enfrentarse a multas que podrían superar los 1.000 euros.
La Ley de Seguros de Automóviles, vigente desde el 25 de julio de 2025, define los «vehículos personales ligeros» e incluye la obligación de contratar un seguro para los patinetes eléctricos. Esto significa que los propietarios disponen de unos meses para buscar y contratar su póliza: hasta enero de 2026 podrán circular sin seguro y sin riesgo de sanción.
No todos los patinetes eléctricos están sujetos a esta obligación. El seguro será necesario para aquellos que:
-
Sean vehículos a motor.
-
Tengan una o más ruedas (incluidos monociclos eléctricos).
-
Estén diseñados para una sola persona.
-
Alcancen una velocidad máxima de 6 a 25 km/h si pesan menos de 25 kg.
-
Alcancen una velocidad máxima de 6 a 14 km/h si pesan más de 25 kg.
Prácticamente todos los patinetes que circulan por la ciudad cumplen estas condiciones. Los que no lo hagan no estarán obligados a contratar un seguro.
Para que un patinete eléctrico pueda asegurarse, deberá cumplir ciertos criterios:
-
Tener un certificado de circulación.
-
Estar inscrito en el Registro de Vehículos de la DGT.
-
Contar con una etiqueta identificativa o matrícula que garantice la cobertura ante daños materiales o personales.
El objetivo de esta normativa es doble: fomentar un transporte urbano más sostenible y aumentar la protección de las víctimas de accidentes. Antes, los responsables podían declararse insolventes y no cubrir los daños. Con la nueva ley, si un conductor no tiene seguro, será el Consorcio de Compensación de Seguros quien indemnice a las víctimas y luego reclame al propietario en caso de negligencia, dolo o manipulación del vehículo.
Desde el 22 de enero de 2024, solo pueden venderse patinetes eléctricos que cumplan con los estándares de calidad y seguridad. Los modelos adquiridos antes de esta fecha podrán circular sin certificado de homologación hasta el 1 de enero de 2027. Para entonces, todos los patinetes deberán cumplir los requisitos técnicos y contar con certificado de circulación, con el objetivo de mejorar la seguridad vial.
Además, desde enero de 2022, los patinetes eléctricos tienen consideración jurídica de vehículo, lo que implica respetar normas como no circular bajo los efectos del alcohol o no usar auriculares mientras se conduce. El incumplimiento puede derivar en multas específicas. Además del seguro y el certificado de circulación, el patinete debe contar con homologación y el identificador correspondiente en el chasis a partir de 2027.
Las sanciones por no tener seguro estarán entre 200 y 1.000 euros, proporcionalmente más bajas que las multas por conducir un coche sin seguro.
Desde 2026 será obligatorio contratar un seguro para patinetes eléctricos, y desde 2027 todos los patinetes deberán estar homologados y contar con certificado de circulación. Esto garantiza mayor control, seguridad vial y protección frente a accidentes.
