Atención: Milagros Tolón

El caradura irrompible, el del maquillaje de cemento armado para parecer compungido, ha cogido un helicóptero de la Fuerza Aérea y se ha ido a la finca estatal de Quintos de Mora, en los Montes de Toledo, a meditar, con sus chicos y chicas de confianza lo que está ocurriendo en España. Es decir, a meditar la corrupción. Parece que acompañan a Sánchez varios ministros y altos cargos y que se ha añadido a la comitiva –dice “El Debate”— Milagros Tolón, delegada del Gobierno en Castilla-La Mancha, que debe ser su vigilante sobre García-Page, al que Sánchez tiene sentenciado porque sabe que es uno de los que le pueden mover el asunto en el partido. Tolón será ministra –dicen— después del comité federal de julio, tras el que habrá probablemente crisis de Gobierno, aunque a Sánchez no le interese ahora agitar mucho la coctelera, aunque, para remediarlo, siempre quedan las puertas giratorias. Nadie va a quedar descontento. Quintos de Mora es una finca que pertenece al Patrimonio Nacional, situada en los Montes de Toledo, en los que viven libremente ciervos y jabalíes. Desde 1942 la finca pasó al Estado y hay una amplia vivienda, como en Camp David, con varias construcciones anexas donde caben invitados y escoltas. Se fue a Quintos de Mora Sánchez, con su cara de cemento y su maquillaje poderoso; se fue al estilo Trump, cuando enfila hacia Camp David en su autogiro de la Navy. En mangas de camisa y con gafas de sol, como el Pichón hace cada vez que se sube al Falcon, que ya es como si fuera suyo. Le da lo mismo la corrupción, él sigue teniendo en sus manos los medios para viajar por el país y por el mundo, gratis del todo. Es el puto amo. No sé si se habrá llevado a La Bego, pero el Pichón es capaz de eso y de más. Al Galgo de Paiporta le acompaña su gente de confianza, del partido y del Gobierno, para meditar. Pero ojo a esta Milagros Tolón, que, repito, no sintoniza nada bien con García-Page. ¿Saben cuál es el problema? Que hay tanto enchufado en el PSOE que en el partido dudan si arriesgarse o no a perder la prebenda constituyendo una plataforma que liquide políticamente a Sánchez. Podrían hacerlo, pero no lo harán. Fíjense lo que dijo Abascal, ayer: “Pedro Sánchez es capar de vender a su madre con tal de mantenerse un segundo  más en el poder, Y no es una expresión, lo digo literalmente”. Y ya cuando empiezan a nombrarse a las madres, mal asunto.