Zohran Mamdani (34 años) se ha proclamado este martes ganador de las elecciones municipales de Nueva York y se convertirá en el 111.º alcalde de la ciudad el próximo 1 de enero de 2026, marcando varios hitos históricos: será el primero de confesión musulmana, el más joven en ocupar el cargo en más de un siglo y el primer regidor en gran escala de origen indio o sudasiático.
La victoria de Mamdani llega tras una campaña relámpago: hace apenas un año era un político prácticamente desconocido y hoy ha derrotado a candidatos de peso como el exgobernador del Estado de Nueva York, Andrew Cuomo, y al aspirante republicano Curtis Sliwa. Con más del 50 % de los votos Mamdani logró imponerse con una plataforma progresista centrada en cuestiones como la vivienda asequible, el transporte público gratuito y los impuestos a las rentas altas.
Su ascenso empezó con una victoria sorprendente en las primarias demócratas, donde desbancó a Cuomo y generó una oleada de entusiasmo entre la juventud y los distritos tradicionalmente olvidados. Hoy ese impulso se ha transformado en poder municipal.
Ahora el desafío empieza: con la ciudad más poblada de Estados Unidos como escenario, la opción de Mamdani como alcalde plantea dos grandes interrogantes. Por un lado, cómo logrará concretar su ambicioso programa en un ayuntamiento y un Estado con equilibrios de poder complejos; por otro, si su victoria anuncia un cambio de era para el Partido Demócrata y para las grandes urbes estadounidenses.
En su mensaje de triunfo, Mamdani declaró: “El futuro está en nuestras manos”, al tiempo que celebró la coalición diversa que lo ha apoyado desde los barrios de Queens hasta Manhattan. Su victoria resonará más allá del ámbito local, porque simboliza un viraje político hacia lo progresista, lo multicultural y lo generacional. Un triunfo que, en palabras de los analistas, pone de manifiesto que “las ciudades están cambiando antes que los países”.




