Con el Tete en Primera Federación y el fútbol de Tenerife en la cuneta, ¿qué hacemos? La llegada a esta isla del tal Garrido ha sido calamitosa; su sindicación con los accionistas locales, un desastre; la actuación de Paulino Rivero, lamentable; y sólo por la incorporación, a última hora, de Rayco García Cabrera se ha podido sostener el último tramo de la temporada. Pero, ¿y ahora qué? De Primera Federación no se sale nunca, una vez que bajas, se acabó. Es complicadísimo el ascenso, hay que ganar todos los partidos prácticamente y se abandona el fútbol profesional para entrar en un limbo llamado semiprofesional. Las acciones de la SAD han caído, ya no valen nada, serán papeles mojados y si hasta ahora se podían vender hasta en cien euros, los grandes accionistas perderán millones y dejarán de interesarse por el club. Ya no vale la pena. El Tete ha muerto, se lo han cargado entre todos, pero el mayor responsable de la catástrofe es un godo que vino aquí a hacer negocio y nos ha dejado a todos con el culo al aire. ¿Y qué pasa ahora? Ni Felipe Miñambres ni cuentos chinos, Felipe no podrá hacer nada por enderezar el rumbo porque no tiene dinero ni medios. El Cabildo, que al principio demostró entusiasmo por ayudar al club y comisionó para ello a su expresidente, Carlos Alonso, ya se despistó del asunto, y Rosa Dávila ha hecho mutis por el foro. El Tete, hoy, es un esqueleto, un espectro del pasado, no sirve para nada, no alberga esperanzas y además ya no representa a nadie. Se acabó el fútbol de altura en la isla y uno no puede menos que recordar a Javier Pérez, que recogió al Tete en la mierda y lo puso a jugar la UEFA. Este sí que fue un gran presidente, al que varios empresarios locales se cargaron para colocar a un inútil como Víctor Pérez de Ascanio. Y aquellos polvos trajeron estos lodos. El C.D. Tenerife está más muerto que vivo. Ya nunca más, o al menos inmediatamente, sacará la cabeza del lodo. Se acabó. Miren lo que pasó con el Málaga, con el Depor y con otros clubes españoles que estuvieron en la élite. Han tardado años y años en volver al fútbol profesional. El Tete ha muerto. ¡Viva el Tete!
miércoles, 25 junio,2025