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martes, febrero 18, 2025

Ven un móvil y se tiran a borrarlo

Debe estar la cosa muy mal cuando hasta las previsiones de “El País” dan a la derecha 190 diputados, si las elecciones fueran, un suponer, mañana. O sea que el felón tiene que tener el culito encogido como una castaña chimba. Y en el batiburrillo nacional, Ayuso se queja de que posiblemente tiene el teléfono pinchado, porque han desaparecido de él sus whatsapp de los tiempos de la pandemia, cruzados con el felón de La Moncloa, que debe tener la picha hecha un lío de tanto borrar. Lo mismo que la picha de García Ortiz, que debe andar en otro lío tremendo con tanto barrido. Rinconete y Cortadillo se habrían puesto las botas en esta España de la falacia y el borrón. Y en el entorno más cercano al lío del borrón y cuenta nueva, Feijóo acusa al Gobierno de Sánchez de delinquir y a su “esbirro” (sic) García Ortiz, también. Que un fiscal general sea esbirro de alguien me parece a mí una concesión a la vergüenza. Y la cosa sigue porque Sánchez continúa atado con soga al palo mayor de su nave a la deriva porque el canto de las sirenas sigue siendo cada vez más fuerte. Fíjense, yo una vez pasé en yate por esa isla –la de las sirenas—, frente a la Costa Amalfitana,  y no pude escuchar su canto hipnótico, me cagué en la madre de Homero y me pegué un baño en el plácido Mediterráneo pero ni por esas me cantaron las muy perversas; sólo le cantan a Sánchez. Debe ser que el coro está dirigido por Sonsoles y que en él canta Begoña, que son las versiones modernas de las chicas de Homero con cola de pez. Bueno, pues las cosas están así, con móviles que se borran misteriosamente y ahora que Pedro manda en Telefónica y que se ha ido Pallete, el asunto irá a más. No me extrañaría nada que el felón fiche a Villarejo, que de eso de los trucos malabares policiales sabe un montón, escondido tras la carpeta y con los ojos vivarachos bajo la visera. Como la mujer de Trump tenía los suyos bajo el sombrero cordobés que estrenó en el Capitolio, precisamente para no ver al del pelo naranja. A Villarejo lo separa de la señora Trump, doña Melania, una gorra de visera, de las que usaba el mítico Ricardo Zamora, y el sombrero cordobés de Bernardino Landete, que rejoneaba como nadie. Incluso mejor que Sánchez. Pues eso, guarden los móviles porque el felón lo borra todo, incluso con la mirada. Y García Ortiz, lo mismo. Ven un móvil y se tiran a borrarlos como posesos. Este año es el año del borrado y tente tieso. Y el de los fiscales sentados en los banquillos, no en los estrados laterales de la sala. Ay.

Andrés Chaves
Andrés Chaves
Periodista por la EOP de la Universidad de La Laguna, licenciado y doctor en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense, ex presidente de la Asociación de la Prensa de Santa Cruz de Tenerife, ex vicepresidente de la FAPE, fundador de la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad de La Laguna y su primer profesor y profesor honorífico de la Complutense. Es miembro del Instituto de Estudios Canarios y de la National Geographic Society.

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