Un chiquillo de 20 años, Gonzalo, goleador del Castilla, saltó al campo de Butarque, tocó su primer balón y marcó, certeramente, con la cabeza. Era el 2-3 y el pase del Real Madrid a las semifinales de la Copa del Rey. Último minuto del partido.
Ayer se produjo el primer paso en el relevo generacional del Real Madrid: jugadores baratos, procedentes de la cantera o contratados muy jóvenes: Endrick, Jacobo Ramón, Asencio y Gonzalo. Es decir, que Ancelotti arriesgó y acertó, aunque Mòdric se marcó un partidazo, Brahim también y Vinicius y Rodrigo, que compartieron mitades, igual.
Mendy ya he dicho que está para que los traspasen, si es que alguien lo quiere, y Valverde no me gusta de lateral. Cuando jugó por el centro cambió el partido. El Madrid se puso 2-0 y parecía un partido cómodo el que le esperaba. Tchouameni mejoraba actuaciones anteriores, jugando en su sitio, en el centro del campo.
El primer gol llegó en jugada de Rodrygo por la izquierda, que le sirvió un balón inapelable, al que Mòdric dio casi de puntera y entró. El segundo lo marcó Endrick, que es un pollo sin cabeza, al estilo tradicional de la expresión, que recogió un mal control de Tapia en el área chica y para dentro. Con este resultado todo parecía fácil.
Pero en esto que Jacobo Ramón, en un cruce ante un rival, cortó un balón que podía haber sido gol y tocó el balón con la mano. El penalti lo tiró Juan Cruz, que fue uno de los mejores del partido, y Lunin estuvo a punto de sacarlo, pero entró, pegado al palo izquierdo de su portería. Y el segundo gol, en la segunda parte, fue otra vez Juan Cruz quien tiró sobre la meta de Lunin, el portero del Real Madrid la hubiera parado, pero el inútil de Mendy desvió la trayectoria del balón y vendió al portero. 2-2 y a la heroica otra vez.
El Madrid, si consigue algo este año, que lo dudo, será por la calidad individual de toda la plantilla. Ayer fue un día de naufragio para Arda Güler, que vagó por el campo como un alma en pena. No dio ni un pase bueno a un compañero, perdía todos los balones. Es un jugador excelente, pero con muchos altibajos. El partido de ayer no existió para él. Lo hizo todo mal.
Asencio se afianza en el centro de la defensa. No sé si ante el Atlético de Madrid, en Liga, Ancelotti dará entrada a Alaba, aunque parece que no está bien del todo y que le falta velocidad. Veremos si repite la defensa de hoy, que no tendrá nada que hacer ante Griezman y compañía. Es deseable que siente a Mendy y dé paso a Frank García, que es rápido y joven y un buen carrilero. Defiende regular, pero peor defiende el francés, que es un paquete. Por cierto, descansaron Courtois, Mbappé y Bellingham. Ni estaban en Butarque, o al menos yo no los vi.
Ancelotti salvó el cogote y el Madrid está en semifinales. Repito que, como equipo, el Madrid está dando una sensación bastante mala. Pero es el Madrid, como se dice siempre, y tiene jugadores de tanta calidad que no le hace falta orquesta; con los solistas resuelve los partidos.
Ayer lo salvó un chico de la cantera, que remató a gol de manera primorosa un balón de córner, cuando sus compañeros las veces que tiraron a puerta lo hicieron al muñeco. Y así no se puede. El muñeco rechazaba todo lo que le llegaba. Por cierto, el muñeco del Leganés era el ex portero del Tete, Juan Soriano, que hizo un par de paradas de mérito.
Y así acabó la tortura china para el aficionado madridista, en el último minuto. Y fue un chico de la cantera el que deshizo el empate, cuando todo abocaba a la prórroga. En fin, otro trámite pasado por el equipo de Ancelotti, más pendiente del Atlético que del Leganés. Veremos lo que ocurre el fin de semana en el Bernabéu, ante un público que echará humo. Y el Atlético está bien, ¿eh?