Ha dicho Leopoldo Afonso, el nuevo alcalde portuense (PP), que Playa Jardín es la prioridad municipal ahora mismo. La playa está cerrada por la rotura del emisario submarino que desemboca en la costa portuense. Y que trae la mierda de tres municipios al mar. Digo que la trae porque yo vivo en el Puerto de la Cruz. Según me dijo Lope Afonso, hermano del alcalde, que es vicepresidente del Cabildo, la obra de reparación del emisario ha sido adjudicada con carácter de urgencia y está ejecutándose. Es de esperar que los trabajos de reparación, costosos y peligrosos para quienes intervienen en ellos por el riesgo de infecciones graves, sean ejecutados cuanto antes y se libere a la playa de los truños que obligaron a cerrarla. El problema no es de ahora. Ese emisario ha dado mucha lata a lo largo de los años. El Puerto de la Cruz tiene un drama y es su escasez de playas y de lugares de baño. En la rada de San Telmo, por ejemplo, hace meses que los váteres están averiados y cerrados. Esto no puede suceder en un municipio y mucho menos en un municipio esencialmente turístico.
Es igual de urgente el emisario submarino de Playa Jardín que los servicios de San Telmo. Los disciplinados turistas que quieren usar los váteres de San Telmo se asombran de que no pueden acceder a ellos. Los bañistas tienen que hacer sus necesidades en el mar, con lo que se crea otro problema. No crean que para mí es fácil hablar de todo esto un día y otro día, porque además de escatológico es desagradable. Así que punto y aparte, aunque sea seguido.
Según Patricia Fernández, que es aparejadora y que sabe mucho de construcción, la obra del hotel Taoro sí puede estar terminada en diciembre. Yo creo que no, pero ella insiste en que sí y que está bastante avanzada. Ojalá, porque el hotel Taoro es fundamental para el Puerto de la Cruz, que sólo cuenta con un hotel de cinco estrellas, el Botánico, propiedad del grupo del Loro Parque. Por cierto que me han dicho que los taxistas del Puerto están cabreados, hablo en general, porque el Loro Parque les quita clientes con sus trenes. Parece que se ha vulnerado el acuerdo que había entre ellos y que hay más trenes de los acordados. El Loro Parque es una institución modelo, una de las principales de Canarias, y yo creo que cualquier cosa que facilite el acceso de los turistas a sus instalaciones es bueno para el Loro Parque, pero también para la ciudad. Así que no estaría de más ser flexibles. Yo estoy ya como M.A.Casañas, que fue jefe de la Policía Local de Santa Cruz en su día. Casañas no se enteró del terremoto de mayor intensidad que sufrió Santa Cruz, allá por los ochenta. Fui yo quien lo despertó, con mis insistentes llamadas para ver cómo estaba la situación en la ciudad. Se vistió y salió pitando para la sede de la Policía Local. No pasó nada grave. Pues el otro día se quemó, o quemaron, una vieja casa que está a unos trescientos o cuatrocientos metros de donde vivo y no me enteré ni de las sirenas de la policía, ni de las de los bomberos. Ni del humo, porque como tengo una pizzería debajo de mi balcón los olores se confunden y todo me huele a pizza. Es lo malo de llegar a viejo, que estás más perdido que el barco del arroz.
Barco del arroz: En los años cuarenta Argentina envió a España el carguero Alcatraz, hasta los topes de arroz. Ayuda de Perón a Franco para paliar el hambre. En su escala en Cádiz se soltaron las amarras, el barco se hundió y se perdió todo su cargamento. De ahí viene el dicho “estás más perdido que el barco del arroz”.
