El papa ha firmado el nombramiento –suponemos que antes de ingresar en el Policlínico Gemelli— del sacerdote Eloy Alberto Santiago Santiago (Las Palmas, 1973) como nuevo obispo de Tenerife.
Según fuentes eclesiásticas, el prelado titular grancanario José Mazuelos, recomendó “con vehemencia” a su canciller y vicario de Economía para el puesto, tras barajar el Vaticano una terna propuesta a Roma por el nuncio en España, Bernardito Auza, oída la Conferencia Episcopal Española.
El candidato que contaba con mayores posibilidades era el actual administrador de la diócesis vacante, Antonio Manuel Pérez Morales. También se había hablado del obispo auxiliar de la diócesis de Canarias (Las Palmas), Cristóbal Déniz. La Diócesis Nivariense no cuenta con obispo auxiliar.
Eloy Alberto Santiago, nuevo obispo tinerfeño, nació en Las Palmas y tiene 52 años. Es licenciado y doctor en Teología por la Universidad Gregoriana y realizó una licenciatura en Derecho Canónico. Perteneció al Servicio Diplomático de la Santa Sede, con destinos en varios países latinoamericanos.
Actualmente se desempeñaba como vicario de Economía y canciller-secretario de la diócesis de Canarias (Las Palmas) y su consagración como obispo y su toma de posesión están previstas para el primero de mayo, en la Santa Iglesia Catedral de La Laguna.
La Santa Sede ha demostrado, al menos, falta de sensibilidad al nombrar como titular se la diócesis nivariense a un sacerdote de Las Palmas, en contra de la voluntad del clero tinerfeño.
El candidato más previsible para ocupar la sede vacante lagunera era el sacerdote palmero Antonio Manuel Pérez Morales, a quien se consideraba como la mano derecha del obispo dimisionario, Bernardo Álvarez Afonso, que presentó su reglamentaria renuncia al cumplir los 75 años, además con una salud muy deteriorada.
La Nunciatura Apostólica, cuyo embajador papal en España es el arzobispo filipino Bernardito Auza, recibió en estos días el nombramiento de Eloy Alberto Santiago como obispo de Tenerife, por parte de la Santa Sede.
Parece ser que se movieron muchos hilos desde la diócesis de Canarias (Las Palmas) para esta designación. También desde la Conferencia Episcopal, en la que Tenerife tiene escasa influencia, al contrario que Las Palmas, que logró, incluso, hace unos años, el nombramiento de otro obispo auxiliar para aquella diócesis, cargo de recayó en el sacerdote de Valsequillo, Cristóbal Déniz.
