El absentismo no es delito, pero sí inmoral

Uno de los argumentos que da el hermano de Pedro Sánchez para que lo aparten de su proceso penal es que el absentismo laboral que con tanto entusiasmo practica –cobra, pero no va a trabajar— no es delito. Si fuera delito estaría media España en la cárcel, es verdad. Pero sí es inmoral. Los alemanes piensan, y a veces dicen, que los españoles somos unos gandules naturales y que trabajamos menos que el sastre de Tarzán. Es rigurosamente cierto. La máxima de un español medio es trabajar lo menos posible, por eso inventaron la palabra “escaqueo”, que comenzó a usarse en los cuarteles cuando la mili obligatoria e hizo fortuna más tarde en la calle. En los cuarteles no quería trabajar nadie y cuando el sargento preguntaba por los que sabían escribir, al que levantaba la mano le entregaban una escoba. Era mejor ser analfabeto, aunque corrieras peligro de que entonces te tocara letrinas, las letrinas donde cagaba hasta el propio sargento. Es posible que España sea el país más absentista de la Europa occidental, incluido entre sus entusiastas defensores el hermano de Pedro Sánchez, que se hace llamar David Azagra, para que lo trinquen lo menos posible cuando cobra sin dar puto golpe. Esta, la teoría de que el absentismo no es delito, es la principal línea de defensa que el hermanísimo esgrime ante la jueza que lo investiga por aprovechado, por valerse de la influencia de su hermano y por gandul y ustedes apliquen las figuras penales que procedan a esas realidades. Ah, y por vivir en Portugal cobrando en España, para pagar menos impuestos; es decir, dando ejemplo. Este chico era muy amigo de Jerónimo Saavedra, incluso creo que vino a su entierro, a Las Palmas, no sé si en el Falcon con Sánchez o por su cuenta. Además, cobrando sin trabajar ha logrado reunir no sé si dos millones de euros, o algo así, que tiene el tío en el banco. Yo creo que en vez de un proceso lo que tiene que abrirse es una suscripción pública para hacerle un homenaje y una estatua en Badajoz. Es director de orquesta, pero no dirige; y el tío no toca ni siquiera el trombón de varas para justificar su sueldo. Yo considero que David Azagra es un máquina. Unos españoles partiéndose los cuernos para llegar a fin de mes y este prenda cobrando de la Diputación de Badajoz y no sé si del Teatro Real, sin nada a cambio. Y eso por ser hermano del grandullón del Estudiantes que no metía un balón en el aro y que tampoco estudiaba mucho porque el Sánchez de La Moncloa, partidario también de la ley del mínimo esfuerzo, copió su tesis doctoral. Yo sostengo que en este país hay tíos pero que muy listos y con una cara de cemento armado. Vaya tropa.