El CD Tenerife atraviesa uno de los momentos más delicados de su historia reciente. Con solo cuatro jornadas por disputar en LaLiga Hypermotion 2024/25, el equipo se encuentra en la 20ª posición, sumando 35 puntos en 38 partidos, y afronta una lucha contrarreloj para evitar el descenso a Primera RFEF tras 12 años en el fútbol profesional.
El conjunto blanquiazul, dirigido por Álvaro Cervera desde diciembre, ha mostrado una leve mejoría en su rendimiento, pero los resultados no han sido suficientes para salir de la zona roja. Con una diferencia de cinco puntos respecto al Real Zaragoza, que marca la salvación con 45 unidades, el Tenerife necesita una combinación de victorias propias y tropiezos de sus rivales directos para mantener la categoría.
En este contexto, las voces del vestuario cobran especial relevancia. Hoy, el centrocampista Yussi Diarra, hablaba para los medios en la Ciudad Deportiva Javier Pérez de cara al encuentro del domingo en el Heliodoro Rodríguez López: “Es importante estar centrados en nosotros mismos”.
Al ser preguntado por los ánimos del vestuario, el maliense aseguró encontrarse “dolidos”, pero muy seguros: “Hemos visto que en cualquier campo y contra cualquier equipo podemos ganar”. Además, habló de la racha de empates y de los últimos partidos: “Hemos tenido culpa, creo que en los últimos partidos ha habido decisiones que no han ayudado”.
Recordemos que para el encuentro de esta semana ante el Ferrol, el Tete tiene tres bajas en la plantilla: Yan Bodiger y David Rodríguez por amarilla en el último partido, y Fabio por expulsión tras agarrar por el cuello a un jugador del Levante UD.
En el ámbito directivo, el presidente José Daniel Díaz, en el cargo desde hace poco más de dos meses, ha manifestado su compromiso con el club y su intención de luchar hasta el final. En recientes declaraciones, expresó que «ser presidente del Tenerife, aunque sea cinco minutos, es un honor».
Díaz también ha abordado la posibilidad de un descenso, indicando que, en ese escenario, se consideraría la implementación de un ERTE antes que despidos definitivos, con el objetivo de regresar a Segunda División en una temporada.
Además, se han detectado desajustes financieros debido a altos salarios, lo que ha llevado a negociaciones con entidades bancarias y a considerar una posible ampliación de capital. El presidente ha destacado la importancia de retener a jugadores clave como Aitor Sanz, Édgar Badia y Maikel Mesa, mientras que otros, como Diarra y Luismi, podrían ser cedidos.
Si bien se complican las opciones de evitar el descenso, en El Burgado nos quedamos con estas palabras de hoy de Diarra: “Mientras matemáticamente haya posibilidades, hay que seguir”.