China lidera en pruebas de vehículos autónomos, con ciudades como Wuhan que cuentan con flotas de taxis sin conductor. Empresas como Baidu, en colaboración con Zhejiang Geely y Huawei, están a la vanguardia del desarrollo y pruebas de estos vehículos, con el apoyo del gobierno chino. Se pronostica que para 2030, el 20% de los automóviles en China serán completamente autónomos. En comparación, el desarrollo de vehículos autónomos en otros países es mucho más limitado.
La conducción asistida y los vehículos sin conductor utilizan cámaras y sistemas láser para recopilar información del entorno, la cual es procesada por las computadoras del automóvil para tomar decisiones sobre la dirección y la velocidad del vehículo.
Además de Wuhan, otras 16 ciudades chinas permiten pruebas de vehículos autónomos. El gobierno chino apoya significativamente a las empresas que fabrican y suministran piezas para estos vehículos, asignándoles áreas de prueba y limitando las discusiones sobre incidentes de seguridad para reducir temores.
La Sociedad China de Ingenieros Automotrices pronostica que para 2030, el 20% de los automóviles vendidos en China serán completamente autónomos y otro 70% tendrá tecnología avanzada de conducción asistida. En comparación, empresas no chinas como Waymo y Ford tienen números de vehículos autónomos significativamente más bajos. En China, los coches eléctricos representan alrededor del 25% del mercado, en contraste con el 7% en Estados Unidos.