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Bill Murray, el inolvidable protagonista de “Lost in translation” (“Perdidos en Tokio”), película que rodó en 2003 en compañía de Scarlett Johanson, dirigidos por Sophia Coppola, rodada en la capital de Japón, está en el Puerto de la Cruz para inaugurar las jornadas llamadas “Los veranos del Taoro”, que cada inicio del verano se celebran en la ciudad portuense.

La presencia del gran actor causó expectación y estos encuentros culturales/recreativos en la ciudad turística han logrado mucha relevancia en los últimos tiempos, de la mano de Eduardo Camacho. Es preciso conseguir que este evento tenga repercusión internacional. El año pasado, la actriz invitada fue Isabella Rossellini, la actriz hija de Ingrid Bergman y Roberto Rossellini, cuyo último papel –como monja— en la película “Cónclave” obtuvo muy buenas críticas. Este año ha sido Bill Murray, el famoso actor de “Atrapado en el tiempo”, el invitado de honor. Hizo muy bonitos comentarios sobre el Puerto de la Cruz, que visitaba por primera vez. Las jornadas celebradas en el Parque del Taoro continúan con gran éxito de asistencia de público, en el famoso Camino de la Sortija, que ahora, con la próxima puesta en marcha del Gran Hotel Taoro, va a recuperar su esplendor del siglo pasado, como lugar de paseo y encuentro que fue de la numerosa colonia inglesa residente en el Puerto de la Cruz. Fue atendido el actor por distintas autoridades portuenses, entre ellas la concejal de Cultura, Desiré Díaz. Y por Eduardo Camacho, naturalmente.

Bueno, pues, hablando de otra cosa, se abrió Playa Jardín, un año después de ser cerrada por la presencia en ella de agua fecales. Situada en la zona de Punta Brava, es la principal playa portuense. El alcalde, Leopoldo Afonso, y los tenientes de alcalde David Hernández y Alonso Acevedo, cortaron los precintos que advertían que el baño era peligroso, por riesgo para las personas de contraer enfermedades graves. Aunque la gente no hacía mucho caso de los precintos, la verdad, y se bañaba en la playa. Eso sí, asumiendo sus riesgos. Parece que mejora la situación de las aguas del mar en el Puerto de la Cruz, tras las actuaciones realizadas en los aliviaderos, en la planta potabilizadora de María Jiménez y en el emisario submarino, que son obras a las que sucederán la ampliación de la planta depuradora y el control de las conexiones a la red de saneamiento de las viviendas e industrias del Valle de la Orotava. Porque el Puerto es el destino final de las aguas negras de tres municipios del Valle: La Orotava, Los Realejos y la propia ciudad portuense. La apertura de Playa Jardín es una buen a noticia para la ciudad turística del Norte de Tenerife, que poco a poco va solucionando sus propios desaguisados. A ver.