El Parlamento portugués aprobó este viernes, en una primera votación, una propuesta de ley que busca prohibir el uso de prendas que oculten el rostro en espacios públicos, como el burka. La iniciativa, impulsada por el partido Chega, contó con el apoyo del PSD, Iniciativa Liberal y CDS-PP, mientras que PAN y JPP optaron por abstenerse. Los partidos PS, Livre, PCP y Bloco de Esquerda se posicionaron en contra.
El texto legislativo plantea que no se podrá utilizar vestimenta que impida identificar el rostro en lugares públicos, aunque incluye excepciones por motivos de salud, trabajo, arte, publicidad o condiciones climáticas. También quedan fuera de la restricción los lugares de culto, espacios diplomáticos y aviones.
El proyecto prevé sanciones económicas que oscilan entre 200 y 4.000 euros según la gravedad del incumplimiento. Además, se impondrán penas de prisión o multa a quienes obliguen a otra persona a cubrirse el rostro mediante coacción o abuso de poder.
Durante el debate parlamentario, el líder de Chega, André Ventura, defendió la medida como una forma de garantizar el respeto a las costumbres portuguesas. Desde el Partido Socialista, Pedro Delgado Alves acusó a la extrema derecha de fomentar la discriminación hacia las comunidades musulmanas.
La propuesta será ahora revisada en la comisión de Asuntos Constitucionales antes de volver al pleno para su votación final. En caso de ser aprobada, entrará en vigor 30 días después de su publicación oficial.





