- Publicidad -
Cajasiete
jueves, 16 octubre,2025

Page consolida su dominio mientras se distancia de Sánchez

⏱ 3 min de lectura

En un contexto de desgaste progresivo del PSOE en casi todo el país, una figura solitaria dentro del partido parece ir contracorriente. Emiliano García-Page, presidente de Castilla-La Mancha y una de las últimas voces críticas dentro del socialismo español, no solo mantiene su hegemonía en su comunidad autónoma, sino que la refuerza. Según una encuesta reciente, de celebrarse hoy elecciones autonómicas, Page obtendría hasta 18 escaños en las Cortes regionales, uno más que en la actualidad, con un 41,7% de los votos, dos puntos por encima del resultado de 2023. Sin embargo, otras encuestas le dan mayoría al PP y Vox, si sumaran sus votos.

Este crecimiento se produce en plena confrontación con Pedro Sánchez y su dirección federal, lo que plantea interrogantes sobre el verdadero respaldo que tiene el presidente del Gobierno dentro de su propio partido. Mientras las encuestas nacionales reflejan una erosión del apoyo al PSOE, la gestión de Page —centrada en un discurso socialdemócrata clásico, alejado del modelo de pactos con fuerzas independentistas— parece encontrar un eco favorable entre su electorado.

El Partido Popular, que en Castilla-La Mancha lidera Francisco Núñez, quedaría relegado al segundo lugar con un 32,5% de los sufragios y podría perder uno de los 12 escaños que actualmente posee. A pesar de liderar las encuestas nacionales, el PP no logra despegar en este territorio, donde su discurso no ha calado con la misma fuerza.

Aunque los datos pueden leerse como una reafirmación de la gestión de Page, también revelan un síntoma preocupante para el PSOE: la desconexión entre la dirección nacional y sus barones territoriales. La figura del presidente castellanomanchego, con su perfil de “crítico tolerado”, le permite a Ferraz mantener una imagen de pluralidad que difícilmente se traduce en influencia real para quienes disienten. La salida de otros dirigentes díscolos como Javier Lambán solo refuerza la sensación de aislamiento político en el seno del partido.

Por otro lado, el sondeo de Sigma Dos también indica que buena parte del crecimiento del PSOE en Castilla-La Mancha proviene de votantes del PP, de Vox e incluso del antiguo espacio de Unidas Podemos. Esto puede interpretarse como una cierta transversalidad electoral, pero también como una fuga de perfiles moderados que no encuentran acomodo ni en el bloque progresista nacional ni en la nueva derecha más polarizada.

García-Page, que ha hecho de la crítica a los pactos con EH Bildu y a las concesiones al independentismo catalán uno de sus ejes discursivos, refuerza así su papel como verso suelto en un partido donde la disidencia tiende a desaparecer. La pregunta que sobrevuela es si su éxito territorial puede servir como espejo o alternativa para un PSOE que, a nivel estatal, parece cada vez más atrapado entre su dependencia de alianzas inestables y la pérdida de confianza de un electorado moderado que busca referentes más reconocibles.

Mientras tanto, Castilla-La Mancha sigue siendo una anomalía: un lugar donde el PSOE no se desinfla, pero lo hace gracias a un liderazgo que cuestiona de forma abierta el rumbo que marca La Moncloa. ¿Puede esta disonancia sostenerse por mucho más tiempo?

Gabriel Suárez
Gabriel Suárez
Redactor de El Burgado, estudiante de Periodismo en la Universidad de La Laguna, directivo de la Coordinadora de Representantes de Estudiantes de Universidades Públicas, Vicepresidente del Consejo de Estudiantes de la Universidad de La Laguna y colaborador en programas de televisión y emisoras de radios

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

- Publicidad -spot_img
spot_img

LECTOR AL HABLA