Una potente erupción del volcán Lewotobi Laki-Laki, ubicado en la isla de Flores, Indonesia, ha obligado a las autoridades a cancelar decenas de vuelos este viernes 21 de marzo de 2025, afectando principalmente el tráfico aéreo hacia y desde la turística isla de Bali. El evento, que tuvo lugar a las 22:56 hora local del jueves (14:56 GMT), generó una columna de cenizas que alcanzó los 8,000 metros de altura, llevando a la agencia indonesia de vulcanología a elevar la alerta al nivel máximo y establecer una zona de exclusión de 7 a 8 kilómetros alrededor del cráter.
El Aeropuerto Internacional Ngurah Rai de Bali reportó la cancelación de al menos siete vuelos internacionales en las primeras horas del viernes, incluyendo rutas hacia Australia y Kuala Lumpur, además de retrasos en otros servicios nacionales e internacionales. Aunque el aeropuerto permanece operativo, las autoridades han advertido que las interrupciones podrían persistir debido a la actividad continua del volcán, situado a unos 500 kilómetros al este de Bali. Las cenizas volcánicas, un peligro conocido para la aviación por su capacidad de dañar motores y reducir visibilidad, han complicado las operaciones en la región.
La erupción, acompañada de fuertes ruidos audibles a más de 80 kilómetros en Maumere, sigue a una serie de eventos sísmicos que han mantenido al Lewotobi Laki-Laki activo desde finales de 2023. En noviembre de 2024, una serie de erupciones dejó nueve muertos y forzó la evacuación de 15,000 personas, afectando también el tráfico aéreo en Bali. Indonesia, situada en el «Cinturón de Fuego» del Pacífico, alberga más de 120 volcanes activos, y las autoridades continúan monitoreando la situación para evaluar posibles riesgos adicionales, incluyendo la amenaza de un tsunami si material volcánico colapsa al océano.
Mientras tanto, aerolíneas como Jetstar han suspendido operaciones entre Australia y Bali hasta que las condiciones sean seguras, ofreciendo a los pasajeros opciones de reembolso o reprogramación. Este nuevo episodio subraya los desafíos recurrentes que enfrentan las comunidades y la industria aérea en este archipiélago volcánico, donde la actividad geológica
