

Manolo Maynar, médico, profesor y amigo, organiza hoy en la CEOE una Tertulia Sanitaria, subtitutada “Innovación y Transformación Digital en el Sector Sanitario: Retos y Oportunidades”, en la que serán ponentes el propio doctor Maynar y el profesor Antonio Alarcó, con Fernando Jiménez del Campo, director gerente del Hospital La Paloma. Moderará Roberto Carlos Rey, CEO de Diagnóstica Europa. Organiza Global Sani Hub y las sesiones comenzarán a las 11 de la mañana en la CEOE Tenerife, en su sede de la Rambla de Santa Cruz número 147. Interesante, no sólo por la excelente cualificación profesional de los participantes sino por el tema a desarrollar, con especial interés para los empresarios, del sector sanitario y de fuera de él. La verdad es que todo lo que organiza el profesor Maynar, que es especialista en cirugía mínimamente invasiva, en radiología y en pediatría –fíjense qué especialidades tan diversas— es novedoso e interesante. Y Antonio Alarcó, lo mismo. Tiene tres doctorados y va a por el cuarto en filosofía.

He tenido la santa paciencia de leerme su último libro y tengo que reconocer que los artículos sanitarios son muy interesantes. Porque yo no soy de esos que presentan libros y escriben prólogos y epílogos –no es el caso en los últimos dos cometidos, en el libro de Alarcó— y no se leen los libros. Bueno, estaremos atentos a esta jornada de la CEOE, que promete ser muy interesante. Ayer se celebró un nuevo acto en el Paraninfo de la ULL, esta vez de imposición de los birretes, a los nuevos doctores de La Laguna. Entre las madrinas de esos nuevos doctores, las profesoras Carmen Rubio, catedrática de Toxicología, y la decana de Derecho, la profesora Dulce Cairós. Con ambas almorcé ayer en Los Limoneros y andaban con prisas porque tenían que acompañar a sus alumnos de doctorado por las escalinatas del Paraninfo, donde les esperaba el rector y el claustro.

Como siempre, un acto bonito –yo protagonicé una ceremonia similar en el año 1986 o por ahí—, cuando el profesor Amador Schüller, rector de la Complutense, me impuso el birrete de doctor. Lo recuerdo con mucha emoción, lo mismo que el día en que me convertí en el primer doctor canario en Ciencias de la Información, lo que me valió página en ABC y todo. Qué bonitos recuerdos aquellos.

Hoy estoy enfrascado en la reedición del resumen de mi tesis doctoral que incluí en un librito titulado “Días de silencio”, que voy a volver a publicar en una edición numerada y limitada, ahora que los sanchistas han puesto de moda a Franco, que es el protagonista principal de esa tesis. Una tesis imparcial aunque yo en aquellos días era un poquillo rojete, color que he abandonado por el de la neutralidad, que es el blanco/vaticano. Así que espero el jueves mantener una reunión con Adrián, de la imprenta encargada de reeditarlo, y voy a vender esta corta edición, pero sin ánimo de lucro, al costo estricto, y con una presentación que todavía no sé dónde la haré y a la que invitaré a algunos amigos. Con eso lleno. O eso espero.





