En mayo de 2025, imágenes satelitales de Planet Labs han revelado un aumento significativo de la actividad militar rusa cerca de la frontera con Finlandia, país que recientemente se unió a la OTAN. Las imágenes muestran la construcción de instalaciones para vehículos blindados en Petrozavodsk, bases para alojar hasta 2.000 soldados, la reactivación de una base aérea y el refuerzo de otra ubicada dentro del Círculo Polar Ártico.
Analistas militares, como Emil Kastehelmi, interpretan estos movimientos como una respuesta de Moscú a la expansión de la OTAN hacia el este. Aunque descartan un ataque inmediato, advierten que Rusia podría desplegar decenas de miles de soldados cerca de Finlandia y el norte de Noruega una vez terminada la guerra en Ucrania.
En respuesta, Finlandia ha anunciado medidas para reforzar su defensa, incluyendo la ampliación de la edad máxima de sus reservistas a 65 años, con el objetivo de alcanzar un total de un millón de efectivos.
La OTAN también ha tomado medidas, planeando establecer un nuevo centro de operaciones en Mikkeli, a 140 kilómetros de la frontera rusa, en respuesta al creciente rearme en Europa del norte.
Estos desarrollos reflejan un aumento de las tensiones en el norte de Europa, con ambas partes reforzando sus capacidades militares en la región.
