Por fin se entera de los incendios

Debe ser que lo llamó el presidente, o quizá el primer ministro, de Portugal, porque Sánchez, por fin, se enteró de que en España se queman cientos de miles de hectáreas de bosque y hasta pueblos enteros. Mañana cogerá el avión, el Falcon, y se plantará supongo que en León, que creo que tiene aeropuerto, y luego se irá en helicóptero a Orense, a visitar a los afectados por los incendios. En el ínterin ha enviado a la pájara, a la ministra de Defensa, para que le eche una mano con la UME. No crean, volverá a La Mareta por la noche, porque él no interrumpe del todo sus vacaciones, que ya sólo le queda una semana. A lo mejor las prolonga, que cara para eso tiene y para más. Hará como en el volcán de La Palma: empezará su discurso prometiendo a los afectados por el fuego lo que luego no va a cumplir, porque es un mentiroso. Los palmeros todavía están esperando las ayudas pendientes. Y como hizo Rajoy –creo que fue Rajoy— cuando el terremoto de Lorca. ¿O fue Zapatero? Da igual, todos son iguales, todos mienten, aunque nadie ha mentido tanto como Sánchez. Zapatero se le acerca, prometió a Ana Oramas (¿), y lo puso por escrito, que Canarias recibiría 10.000 millones de euros y el control de las aguas territoriales. Ni un euro, ni un litro de agua salada. Zapatero, el ahora sicario del Galgo de Paiporta, es otro mentiroso compulsivo. Últimamente, España no tiene sino políticos que no cumplen y que nos esquilman, como el fúnebre de Montoro, que nos dejó con los bolsillos vacíos cuando él los tenía llenos. Él y su familia. Eso me hace pensar que casi todos son iguales, porque yo tengo que salvar al mejor presidente español de la democracia: José María Aznar. Este no mentía. Y, errores aparte, que los tuvo, puso a España en el mundo, con un par. Fue un tipo honesto. Yo lo echo de menos, no sé ustedes, desocupados y amables lectores. Comparen la categoría los Aznar con la familia de las saunas gays, por ejemplo, incluidos la catedrática y el músico. Vaya diferencia personal y política, Dios mío. Bueno, pues el Galgo de Paiporta, a la velocidad de crucero para que no lo abucheen, estará mañana visitando algunas zonas afectadas por los incendios. Mientras la gente se quemaba, o veía quemar lo que era suyo, él estaba solazándose en el mar de Lanzarote, contaminándolo. Por cierto, ¿cuándo recibirá al aduloncito de aquí? Porque la entrevista con Clavijo estaba prevista para el lunes. ¿Le dará tiempo? ¿O el Galgo la cancelará?