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El presidente argentino, Javier Milei, tuvo que ser evacuado este miércoles durante un acto de campaña en Lomas de Zamora, al sur del Gran Buenos Aires, tras un ataque de manifestantes que arrojaron objetos —piedras, huevos, ramas y botellas— contra la camioneta descubierta en la que viajaba junto a su hermana, Karina Milei, y el candidato José Luis Espert. La situación, que generó enfrentamientos con la policía, pudo desbordar la seguridad del acto electoral y agravó la tensión política en pleno tramo final de la campaña legislativa de domingo.
La caravana de Milei circulaba por las calles del bastión peronista cuando, según testigos y medios locales, una multitud opositora comenzó a lanzar proyectiles. En una de las escenas más sensibles, una piedra impactó en el capó de la camioneta y obligó al mandatario a agacharse para resguardarse. Inmediatamente, su equipo de seguridad lo trasladó a un vehículo blindado, mientras Karina Milei y José Luis Espert también abandonaron el lugar escoltados. Afortunadamente, no se registraron heridos.
El operativo desembocó en choques entre manifestantes y las fuerzas del orden, quienes respondieron con escudos para proteger la caravana presidencial y dispersar a la multitud. El número de opositores superaba con creces al de simpatizantes oficialistas, lo que intensificó el conflicto.
Milei afronta acusaciones de corrupción vinculadas a su entorno, entre ellas su círculo familiar, en particular a su hermana Karina, señalada por presuntas irregularidades en la contratación de servicios en la Agencia Nacional para las Personas con Discapacidad. Estas denuncias han exacerbado las protestas públicas contra su gobierno y su proyecto ultraliberal, que afecta a sectores centrales como jubilados, docentes y profesionales sanitarios.
