Tras el Gran Premio de Japón de la semana pasada, Lewis Hamilton expresó su preocupación por el rendimiento de su monoplaza en comparación con el de su compañero de equipo, Charles Leclerc.
El siete veces campeón del mundo finalizó séptimo en Suzuka y no pudo seguir el ritmo de su compañero, quien terminó cuarto. Hamilton señaló que, aunque ha habido progresos, existen diferencias significativas entre ambos lados del garaje que afectan su desempeño en pista.
Así, el piloto británico comentaba: «Estoy contento por haber progresado, pero tengo ganas de que llegue la próxima carrera para ver si hay cambios en comparación con las tres anteriores. Hay un déficit entre los dos lados del garaje”.
Por su parte, Charles Leclerc indicó que, aunque el balance del coche es adecuado, el monoplaza carece de la velocidad necesaria para competir con los líderes. Ferrari acumula 35 puntos en el Mundial, mientras que McLaren lidera con 111 puntos, seguido por Mercedes con 75 y Red Bull con 61.
La diferencia entre uno y otro podría deberse, simplemente, a configuraciones que favorecen estilos de conducción distintos: mientras el monegasco prefiere un coche con más agresividad en el tren delantero, Hamilton suele destacar con mayor estabilidad trasera.
Esta semana tendremos el Gran Premio de Bahréin del 11 al 13 de abril, en el que podremos ver si Ferrari consigue igualar los monoplazas o si, por el contrario, continúan las diferencias entre ambos garajes.
