El gobernador Ron DeSantis, ha tomado la decisión de prohibir la venta de carne cultivada en la Florida. En lugar de productos creados en laboratorio, el estado apostará por la proteína “100% real”, en defensa de los ganaderos y la agricultura. DeSantis lanzó duras críticas contra “el plan de la élite global de obligar al mundo a comer carne cultivada en una placa de Petri o insectos para lograr sus objetivos autoritarios”.
La carne cultivada tiene el mismo ADN, composición celular y sabor que la tradicional de pollo, cerdo, vaca, pavo o cordero. Pero en lugar de crecer en granjas y ser llevada al matadero, se obtiene a partir de células musculares capturadas mediante biopsia y luego se reproducen en biorreactores.
Hasta el momento, la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. solo ha dado el visto bueno a dos empresas para producirla y venderla. Ahora, algunos estados cuestionan el futuro de este tipo de alimentación, y tratan de legislar para prohibir su comercialización. El conservador DeSantis, que mantuvo la disputa con Trump y otros para conseguir ser el candidato republicano en las próximas elecciones presidenciales, ha dado un paso al frente en contra de lo legislado por el gabinete de Joe Biden.
También en Italia, tras la propuesta del ministro de Agricultura y Soberanía Alimentaria, Francesco Lollobrigida, y del ministro de Salud, Orazio Schillaci, no será posible producir o comercializar alimentos de origen sintético, incluida la carne sintética.
Quienes defienden la llamada carne cultivada aseguran que se trata de una alternativa con menor impacto ambiental que los alimentos de origen animal. Hasta la fecha, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) no ha autorizado la puesta en el mercado de ningún producto cárnico sintético.
Realmente suena a ciencia ficción producir carne sin necesidad de criar y sacrificar animales. Hasta el momento, solo unos pocos países han regulado -o están en proceso de hacerlo- su fabricación y venta: Estados Unidos, Singapur, Israel, Reino Unido y Suiza.
