Hombre, faltaba el Consejo de Estado

Al final todo se sabe. Y se ha sabido que una nueva nota de prensa que revela datos confidenciales, metadatos fiscales, del novio de Ayuso salió de un ordenata del Consejo de Estado, concretamente del de su jefa de prensa, Belén Labadié. Son datos que sólo deberían conocer los inspectores de Hacienda actuantes. Supongo que esos que cobran pluses por perseguir “legalmente” con saña a los ciudadanos. Una práctica que no es sólo del PSOE, sino también del PP, o sea que no se rasgue las vestiduras la derechona por el método de la gratificación. Qué bonito, qué ejemplar, qué dicha, tía Jadicha. El PSOE maniobra otra vez para aplazar la declaración del novio de la presidenta de Madrid para hacerla coincidir con la de Begoña Gómez y montar un totum revolutum, un potaje de información y confundir al personal. No sabe nada Sanchez. Lo que pasa es que los trucos se le acaban y él es consciente de que no hay mal que cien años dure, ni cuerpo que lo resista. La nueva nota de prensa sobre el novio de Ayuso intenta justificar con datos confidenciales la petición de aplazamiento de la declaración judicial; repito, con la aviesa intención de hacerla coincidir con la de Begoña, la hija del dueño de las saunas gays y esposa del presidente del Gobierno. Coño, estamos rodeados. Y Urdangarín se pasó no sé cuántos años en la cárcel de Brieva por un caso similar. Es la segunda vez que el PSOE aplaza la declaración de Alberto González, ahora para incorporar a la causa un delito imposible, como es el de administración desleal de su propia empresa, según leo por ahí. Estos chafalmejas tendrán que caer un día, lo que ocurre es que con la legión de asesores que le estamos manteniendo tardarán un poco más. Pero caerán, no tengo dudas.