El libro de Entrambasaguas

El libro de Alejandro Entrambasaguas, La Sagrada Familia (La Esfera de los Libros), que ya he leído, supone, ni más ni menos, que la crónica de la corrupción en España. En cualquier país europeo se cuenta lo que relata Alejandro y la familia Sánchez afectada estaría o en el talego o muy lejos del palacio de La Moncloa. Con la justicia lenta, garantista y segura que tenemos no sé cuándo va a suceder algo de esto, pero les aseguro que, dando por bueno lo que Alejandro cuenta, y lo cuenta con un estilo impecable y con gran presunción de veracidad, la cosa la tienen pero que muy fea los tres personajes de la familia, porque detrás de las andanzas de la Bego y del hermanísimo tiene que haber, a la fuerza, un señor X. Si además contamos a Koldo, Cerdán, Ábalos y el mismo Zapatero, la banda de Alí Babá se amplía. España es hoy un pozo de corrupción como jamás había sido, nos han echado prácticamente de Europa y ya no llaman al presidente para las reuniones más básicas de los poderes de la Unión. Me he quedado con la boca abierta con los datos que aporta el periodista de investigación de El Debate, un relato minucioso, supongo que muy inspirado, además de en las propias pesquisas, en las investigaciones de la UCO de la Guardia Civil. Me he despachado, y mira que es intenso, el libro de cuatrocientas y pico páginas del citado periodista. Es la primera gran crónica seria del infausto periodo de Pedro Sánchez, de su mujer y de su hermano. El recorrido judicial de Pedro Sánchez va a llegar, tarde o temprano, en cuanto alguien se vaya de la lengua, lo cual es inevitable, sobre todo cuando deje el poder, sea pronto (que no lo creo), sea cuando toque, a pesar de lo que diga su inmoral compinche Tezanos. España es hoy, a los ojos del mundo, una caricatura de país, en la que ni siquiera se puede correr una Vuelta Ciclista en paz. Se les ha descontrolado todo, pero alentado por ellos mismos, porque en el país revuelto creen que está su salvación.  El PSOE sigue echando mierda a su propia comida y los socios de conveniencia de Sánchez no se atreven a abandonarlo porque entonces se abandonarían a sí mismos y esto no les renta. De momento escapan, pero no será por mucho tiempo. Es el periodo más infausto para España desde la Transición y no digo yo que los que vienen sean la solución, pero desde luego no serían capaces, jamás, de llegar al grado de despotismo, de mentiras y de corrupción al que han llegado estos. Han traspasado todas las líneas rojas de la decencia.