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El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, en una declaración institucional, ha responsabilizado directamente al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de los graves incidentes ocurridos este domingo en la capital durante la última etapa de La Vuelta ciclista a España. Los disturbios obligaron a suspender la prueba y, según Almeida, son “el fruto del odio y la violencia alentados de forma irresponsable por dirigentes de la izquierda”.
Almeida describió la jornada como “tristísima”, señalando que la violencia se impuso al deporte. Según relató, se lanzaron ciclistas a la calzada y se esparcieron chinchetas y cristales por las calles con la intención de impedir el paso del pelotón, lo que puso en riesgo la integridad de los corredores. “El deporte no puede perder nunca contra la violencia, pero ayer perdió”, lamentó.
El regidor madrileño acusó a Pedro Sánchez de ser “el directo responsable” de que se produjeran los incidentes. En su opinión, las declaraciones del presidente “incitando a los manifestantes” fueron “profundamente irresponsables”, especialmente cuando conocía la tensión que se vivía en la ciudad.
Almeida advirtió además que “lo peor de Pedro Sánchez está por llegar” y que el líder socialista busca “el enfrentamiento con la capital” para proyectar “una imagen de disturbios y revueltas en Madrid”, con la intención de esconder la trama de corrupción que lo rodea.
Almeida aseguró que los disturbios forman parte de una estrategia política del Gobierno y sus aliados. Sin embargo, se mostró convencido de que los madrileños y el resto de españoles no cederán ante la violencia: “Podrán incendiar calles, podrán generar disturbios, pero les volveremos a ganar en las urnas”, afirmó con rotundidad.
