⏱ 2 min de lectura
El abogado Miguel Zerolo Valderrama falleció ayer en Santa Cruz a los 101 años, víctima de una infección pulmonar que no pudo superar.
Era el padre de Miguel Zerolo Aguilar y de Javier Zerolo Aguilar, el primero gran alcalde que fue de Santa Cruz y el segundo compañero periodista, co-fundador de El Burgado y de la recordada Radio Burgado.
Miguel Zerolo Valderrama, miembro de una familia apreciada y tradicional tinerfeña, ejerció su profesión durante largos años en Santa Cruz. Era un hombre profundamente honesto, fiel a su palabra y dotado de un gran sentido del humor. Un tinerfeño y un canario ejemplar.
Fue el esposo de Antoñita Aguilar y juntos formaron una gran familia con sus hijos Maúcha, Miguel, Fátima, Javier, Nacho, Carlos y Pipo. Miguel Zerolo era un santacrucero de postín, un hombre culto, que adoraba a su familia y que luchó por su tierra desde puestos administrativos y en el libre ejercicio de su profesión. Amaba las causas justas y no se callaba nada jamás. Era también un hombre valiente y culto.
A la hora de redactar estas líneas siento una profunda pena por su desaparición. Yo sé que es difícil pedirle más años a la vida, pero hace quince días, como me contaba uno de sus hijos ayer, estaba riéndose abiertamente, disfrutando de su familia. No pudo resistir una repentina infección pulmonar, tras sufrir un ictus del que, incluso, se recuperó.
A Antoñita, su mujer, que fue también la compañera de toda una vida, un fuerte abrazo. Y otro a sus hijos, unidos como una piña en torno a la figura de su padre, que fue un ejemplo para ellos y para mucha gente.
Un gran Señor. DEP.