El periódico El Debate, que dirige Bieito Rubido, ha encargado una encuesta, la primera del año, a la empresa Target Point, con más de 1.000 muestras. Naturalmente que no podemos reproducirla, pero sí ofrecer, a modo de información –con la recomendación de que ustedes consulten la muestra en el referido periódico on line—, los principales datos. A pesar de las cancaburradas que cometen sus dirigentes, el PSOE no es que se desplome, aunque sí baja unos 3 puntos y pico en la intención de voto. Supongo que cuando empiece la orquesta y sinfonía de los recuerdos a Franco se va a ir a tomar por saco.
Franco ya se fue. Pero quién sí prácticamente desaparece es Sumar, el partido de la brujita gallega Yolanda Díaz, que puede perder 20 diputados, en favor mayoritariamente del PP y de Vox. Está claro que Feijóo no puede contra Sánchez.
El partido de Abascal gana +2,5 puntos y Sumar pierde -5,4, o sea que cada vez se demuestra con más fuerza que esta mujer, revoltosa y de ideas absurdas, hubiera hecho mucho mejor quedándose en su casa y allí en su Galicia natal, antes de estarnos jodiéndonos permanentemente con sus absurdas propuestas.
El panorama político español va a cambiar, sobre todo si se sustancian los casos de corrupción de un Partido Socialista al que sólo sostienen los millones de paniaguados que tiene en toda España. Si no fuera por ellos hace mucho tiempo que Pedro Sánchez estaría, con su hermano y la Bego, viviendo en Portugal. Esto es lo que hay, de momento. Si quieren conocer todo el sondeo, que es muy interesante, acudan a El Debate que, por cierto, es un periódico que está subiendo mucho en número de lectores. Yo soy un asiduo del artículo de Alfonso Ussía, quien aparte de que me cae bien escribe tan correctamente y de manera ocurrente como su abuelo, don Pedro Muñoz Seca, asesinado durante la guerra civil por la izquierda incivil. Y ahora voy a lo que queda: las rebajas anticipadas y las compras compulsivas de los ciudadanos. Se abren hoy los tres días más frenéticos de las compras innecesarias de Navidad, en las vísperas de Reyes, fechas en las que todo el mundo se vuelve loco. No yo, que sólo compro un perfumito para mis hijas, sino quienes vacían los establecimientos de cosas inútiles, que ya han puesto en rebajas algunos de ellos. Una auténtica locura. En estos tres días no se podrá salir a la calle y yo estoy temiendo tener que ir mañana a La Villa, a comprar comida para Mini, que la tengo casi agotada. Así que esta mañana, tempranito, enfilaré hacia el centro comercial y haré acopio de las latas correspondientes, iré a Los Limoneros a hacer la entrevista de los lunes para el Diario de Avisos y después a casa, recluido aquí hasta pasado Reyes, muy pendiente de Venezuela, a ver lo que pasa antes del gran día, el día 10. Yo, qué quieren que les diga, no soy demasiado optimista de que Maduro se vaya voluntariamente. Me da que a ese hay que despegarlo de ahí con agua caliente. ¿Y Zapatero? En lo suyo, agazapado, cultivando el escapismo. Que ni chiquito personaje. Es toda vía peor que el chulito de La Moncloa. El esquiador.
